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Este domingo Manchester United y Newcastle disputaban la final en búsqueda de uno de los tres trofeos principales que otorga el fútbol inglés, la Copa de la Liga. A casa llena en el templo del fútbol inglés, dos de los mejores equipos de la campaña en Inglaterra buscaban coronarse.
El Manchester United de Erik Ten Hag quería cerrar una semana espectacular, en la que venían el pasado jueves de eliminar a nada menos que a Barcelona para pasar a los octavos de final de la UEFA Europa League.
La primera ventaja para Manchester United llegó al minuto 33 con una jugada de pelota parada. Un centro de zurda del lateral Luke Shaw fue tranformado en gol por Casemiro, en lo que fue el cuarto gol en los últimos doce partidos para el mediocampista brasileño tomando en cuenta todas las competiciones.
Seis minutos después, el neerlandés Weghorst, aquél que tuviese el famoso encontronazo con Lionel Messi después de terminados los cuartos de final de la Copa del Mundo entre Argentina y Países Bajos; habilitó muy bien a Rashford, y el delantero inglés vió como su disparo se desvió en Botman para meterse al fondo del arco en lo que fue el 2-0 a favor de Manchester United.
Newcastle, un equipo muy popular en Inglaterra que sin embargo no gana ninguna competición desde 1969, mejoró mucho e intentó con sus armas en el segundo tiempo, pero no pudo hacer mella en un Manchester United decidido a ganar su primer trofeo desde 2017.
Precisamente en 2017 fue la última vez que Manchester United ganó la Copa de la Liga, misma campaña en la que también se coronaron en la Europa League bajo la tutela del portugués José Mourinho. La llegada del técnico neerlandés Ten Hag ha supuesto un renacer futbolístico para el gigante europeo, que hoy empieza a recoger los frutos de una labor bien realizada con la consecución de esta Copa de la Liga.