Gol, despedida y elogios de ambos lados del océano
El destino suele tener ironías deliciosas. Estevão Willian, joya brasileña de apenas 18 años, disputó su último partido con la camiseta de Palmeiras enfrentando precisamente al club al que se sumará en los próximos días: el Chelsea. Y como si eso no bastara, firmó una obra maestra que dejó sin palabras a propios y extraños, incluido Enzo Maresca, su futuro entrenador.
El golazo no le alcanzó al Verdao, que cayó 2-1 y quedó eliminado en los cuartos de final del Mundial de Clubes 2025. Pero sí bastó para que Maresca, flamante técnico de los Blues, rompiera el hielo con su nuevo pupilo. “Después del partido fue la primera vez que hablamos. Le dije que fue una noche ideal: ganamos nosotros y él convirtió un gol fantástico”, confesó el italiano.
El inicio de una relación prometedora
Maresca, que atraviesa su primera temporada al frente del conjunto londinense, se mostró entusiasmado con la llegada del brasileño, cuya transferencia se cerró por unos 57 millones de euros. “Tiene un potencial extraordinario, estamos hablando de un jugador que puede marcar una época en el club”, aseguró el técnico.
Sin embargo, también fue cauteloso respecto a lo que viene: “El salto a Europa no es sencillo, requiere adaptación en lo físico, lo táctico y lo emocional. Nosotros lo vamos a acompañar en ese proceso. Lo importante es que llegue feliz, con ganas de aprender, y que no pierda el disfrute”.
Ferreira se despide de su “hijo futbolístico”
Del otro lado, la emoción no faltó. Abel Ferreira, entrenador de Palmeiras, no ocultó su afecto por el joven atacante, a quien acompañó en su explosión definitiva. “Tengo dos hijas, pero Estevão es como un hijo para mí. Estoy orgulloso de todo lo que creció y de lo que representa”, declaró conmovido tras el encuentro.
El técnico portugués también le dejó un mensaje a Maresca, con quien compartió algunas palabras en la zona mixta. “Le dije que se llevan a un jugador sensacional, pero sobre todo a una persona increíble. Tendrán que tener paciencia, porque cometerá errores, como todo joven. Pero su talento es indiscutible”.
Una despedida con sello propio y futuro de estrella
El tanto que marcó Estevão fue una demostración de lo que está por llegar a Stamford Bridge: velocidad, precisión, desequilibrio y mentalidad ganadora. En un contexto adverso, mostró la categoría de un jugador que está listo para dar el salto. No fue solo un gol; fue una carta de presentación en el escenario internacional.
Chelsea ganó y avanzó a semifinales, pero si alguien dejó una huella en la noche fue el brasileño que ya tiene las valijas listas rumbo a Londres. Y aunque el presente inmediato lo dejará fuera de las próximas rondas del torneo, el futuro comienza ahora.
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