Al irregular presente futbolístico que está atravesando en su liga local, en la que marcha séptimo, en los últimos días se sumaron nuevos conflictos, mucho más preocupantes que la actualidad del que es uno de los clubes mas laureados de todo el mundo futbolístico.
Se trata de la Juventus italiana, que luego de que la Fiscalía de Turín allanara la sede del club en el marco de la investigación por fraude fiscal y emisión de facturas falsas en la compra-venta de jugadores, este lunes la Asociación de Consumidores italiana pidió que se sancione a la Juventus con el descenso de categoría y que se le revoquen los títulos conquistados en el caso de que se confirmen las acusaciones.
“Si se confirman las acusaciones, el club bianconero deberá descender y se le deberán revocar los últimos títulos. Se falseó la lícita competencia entre clubes de la Serie A italiana”, informó la Codacons en un comunicado que causó revuelo en el fútbol italiano y europeo.
“Como forma de tutela hacia los aficionados engañados, la Asociación presenta un recurso a Antitrust (el órgano garante de la competencia en Italia) y a la Fiscalía”, agregó.
La sede del Juventus fue registrada la noche del pasado viernes por orden de la Fiscalía de la ciudad de Turín. Los agentes de la Guardia de Finanza accedieron con la orden de buscar documentación relativa a las cuentas del periodo 2019-2021 y se llevaron información sobre la compraventa de jugadores y sobre la formación de los presupuestos.
Hay más de 280 millones de ganancias de capital vinculadas con la compra-venta de jugadores que se consideran poco claras. Entre los investigados está la cúpula directiva del Juventus: desde el presidente, Andrea Agnelli, al vicepresidente, el checo Pavel Nedved, hasta el anterior director deportivo, Fabio Paratici, ahora en el Tottenham.
Juventus aseguró en una nota que está dispuesto a colaborar con los investigadores y defendió que actuó respetando las reglas vigentes. “Las acusaciones son muy graves y abren dudas sobre los últimos campeonatos de fútbol, incluso porque, como sabemos, existió un auténtico dominio bianconero en los últimos años”, afirmó el presidente de Codacons, Marco Donzelli.
No sería la primera vez que el club fuera acusado de sacar ventaja de forma ilegal y recibiera un descenso como consecuencia. Luego de la temporada 2005-2006, la Juve fue enviada a la Serie B luego de que se confirmaran acusaciones de manipulación arbitral mediante intervenciones telefónicas.
Debido al escándalo, se decidió dejar nulo el campeonato de 2004-2005 ganado por Juventus. El de 2005-2006, también ganado por los de Turín, fue adjudicado al Inter, mientras que el club bianonero fue relegado a la segunda división con nueve puntos menos como castigo. De todas formas, Juventus regresaría a Serie A en la temporada siguiente.