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El legendario Old Trafford se prepara para un nuevo episodio del Derbi de Manchester, este domingo a las 16:30 (hora local), en el marco de la fecha 31 de la Premier League. Dos gigantes del fútbol inglés se cruzan con realidades contrastantes: Manchester United, golpeado tras caer ante Nottingham Forest, necesita reencontrarse con su juego; Manchester City, en cambio, llega en ascenso, con una victoria sólida sobre Leicester y la mira puesta en los puestos de Champions.

El equipo dirigido por Rúben Amorim atraviesa una etapa irregular y está lejos del protagonismo habitual. La derrota 1-0 ante Nottingham Forest profundizó las dudas y encendió las alarmas en un plantel que solo ha logrado 10 victorias en 30 jornadas, con un saldo negativo en goles: 37 a favor y 41 en contra.

Su desempeño como local tampoco invita al optimismo: en 15 partidos jugados en Old Trafford, el United suma apenas seis victorias, con siete derrotas y dos empates. Un registro que evidencia la falta de consistencia y que puede pesar psicológicamente en un partido de alta presión como este.

El conjunto de Pep Guardiola —aunque actualmente dirigido interinamente por su asistente— parece haber recuperado el impulso tras vencer 2-0 a Leicester City, con goles de Jack Grealish y Omar Marmoush, y suma ya 15 victorias en 30 fechas, consolidando su papel de animador de la competencia.

El City ha mostrado una versión más sólida fuera de casa que en temporadas anteriores: en 15 salidas, ha caído seis veces pero también ha sumado puntos en nueve oportunidades (tres empates y seis triunfos). Sus 57 goles a favor lo posicionan entre los equipos más goleadores del torneo.

Más allá del contexto actual, hay un dato que resuena con fuerza: el United no ha ganado al City en casa en sus últimos 16 enfrentamientos como local, con nueve derrotas y siete empates. Sin embargo, en el último duelo directo de Premier, disputado en diciembre de 2024, el United dio el golpe con un 1-2 a domicilio, cortando una racha negativa y demostrando que en los clásicos, todo puede pasar.

En lo que va de la temporada, la distancia en la clasificación es clara: Manchester City es quinto con 51 puntos, mientras que el United se ubica en la 13.ª posición con 37, a 14 unidades de su eterno rival. Para los “Red Devils”, ganar es vital para evitar hundirse aún más en la mitad baja de la tabla. Para el City, es la oportunidad de seguir escalando y mantener viva la ilusión de pelear por el título o asegurar un boleto europeo.

Más allá de la tabla, el momento o las estadísticas, el Derbi de Manchester nunca es un partido más. El entorno, la historia y la presión convierten este choque en un evento cargado de emociones. Para el United, representa la posibilidad de redención. Para el City, un paso más en su carrera ascendente. El domingo, Old Trafford será el escenario de una batalla que promete fútbol, intensidad y orgullo mancuniano en juego.