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Los primeros minutos del juego fueron muy entretenidos, con ambos equipos abiertos buscando en fase ofensiva. La más clara en este tramo del partido fue un disparo desde fuera del área de Camavinga que se estrelló en el travesaño al minuto 19.
Después del minuto 25 el partido bajó un poco su intensidad, no sólo por la naturalidad de la disminución del rigor físico, sino que parecía empezar a pesar más el marcador en la ida. Un buen intento de Darwin Núñez fue desviado al córner por Courtois al minuto 33, pero a estas alturas los intentos de Liverpool eran más aventuras individuales que gestaciones colectivas.
Con el empate sin goles se fue el encuentro al descanso, y sin dudas el Liverpool del Klopp parecía necesitar del más improbable de los milagros para ponerse incluso en competencia. La diferencia en el marcador global no solo era notoria, sino que además Real Madrid es un rival demasiado formidable como para una posible debacle de semejantes magnitudes.
A quince minutos del final el trancurso del segundo tiempo no era más que un trámite en la espera de la clasifición concreta de Real Madrid. La superioridad blanca en la mitad de la cancha era notoria. Por si no era convincente ya por sí, Real Madrid amplió la ventaja al minuto 78 cuando Vinicius desde el piso habilitó a Benzema, y el francés no tuvo ningún problema sólo frente al arco para anotar el único gol de la noche.
Este viernes al mediodía en Suiza, (mañana en República Domicana), será el sorteo para determinar los cruces de cuartos de final. Este es un sorteo abierto, por lo que no hay limitación alguna, cualquiera puede quedar con cualquiera sin importar el país de origen.
En el sorteo sabremos también los posibles cruces de semifinales, ya que el viernes se determina también al azar la forma del bracket para el resto de la Champions League. Real Madrid, Manchester City y Bayern Munich son sin dudas los tres favoritos para llevarse el título en la edición actual del mejor torneo de clubes del mundo.