A sus 33 años, Lorenzo Quintana es uno de esos tantos casos que andan por ahí tratando de abrirse camino en el béisbol, quizás como la eterna promesa que un día, luego de salir de Cuba, parecía destinada a triunfar en Grandes Ligas, pero la oportunidad de llegar al primer nivel, nunca llegó.
Y Quintana pudo llegar y dar el salto, debió hacerlo desde sus años en las granjas de los Astros de Houston y al momento de su entrada a los Marlins de Miami, todos en la Isla y más allá, todos pensamos que era el momento, pero no, el oriundo de Pinar del Río, en el occidente de Cuba, terminó siendo liberado incluso por la franquicia de Florida.
Números
Tal como refiere MLB.com, en 60 juegos en la filial triple A de los Marlins, el antillano registró una hoja de corte 246/306/479, sumando, además, 14 jonrones, 12 dobles y 1 triple, así como 54 carreras impulsadas.
Casi al unísono con su despido, a mediados de agosto, comenzaron a circular rumores que lo vinculaban a los Tigres del Licey, uno de los equipos legendarios en la pelota invernal dominicana, la conocida LIDOM.
La nueva oportunidad
La noticia se confirmó y el destino no era nuevo para Quintana que ya en 2019, había reforzado a los Tigres y tal como lo afirmó, Audo Vicente, gerente general de Licey; el criollo estará desde el comienzo de los entrenamientos y hasta el final de la temporada.
El cubano fue el primer refuerzo que oficializaron los 22 veces campeones nacionales y como lo muestra su perfil, puede ser un plus determinante con su aporte ofensivo.
Un bateador nato
Desde las Series Nacionales en Cuba, jugando para los Vegueros de Pinar del Río, Lorenzo Quintana mostró su potencial como bateador, refrendado en un average de 310, durante siete temporadas, de acuerdo con las estadísticas de la página oficial del béisbol cubano.
La experiencia
Al mismo tiempo en su paso por los certámenes invernales en el caribe, Quintana acumula una hoja de corte con 304 de promedio y un OBP de 372, así como 118 extrabases.
Se trata de un bateador nato, capaz de conectar para todas las bandas del terreno y con la resiliencia necesaria para hacer los ajustes precisos en su mecánica y poder responder en momentos importantes.
La versatilidad
En este sentido, también podemos resaltar que además de su bateo, en materia defensiva, Lorenzo Quintana puede asumir tanto en la receptoría como en primera base.
Todo apunta para ser un primer gran paso por parte de los Tigres del Licey en pos de regresar a Play Off siquiera, instancia a la cual no han llegado en las dos últimas campañas y en este empeño, Lorenzo Quintana será más que un simple valor añadido.