Era sabido que Fernando Alonso iba a tener un premio por la gran temporada que está teniendo en sus cuarenta años. Esta nueva juventud, conduciendo como en sus mejores momentos, a pesar de no tener un coche de los más competitivos, fue valorizado por Alpine, su escudería, que lo quiere tener una temporada más en el equipo.
El español oficializó su vínculo con la sucesora de Renault en la máxima categoría del automovilismo y, tras estar dos años fuera de la Fórmula 1, en apenas seis meses convenció a todos de que todavía tiene la pasta de campeón mundial. El vínculo con Alpine se extenderá hasta 2022.
Alonso es de los pocos pilotos en la competición capaz de elevar el nivel del monoplaza más allá de sus posibilidades. La experiencia del piloto lo pone a la altura de figuras como Hamilton o Verstappen, que, claramente, tienen mayores recursos. Y a eso quiere apuntar Alpine a partir de ahora.
La escudería francesa sueña con volver a luchar por un Mundial, apoyada en la igualdad de motores, que supuestamente va a garantizar la FIA en 2022 (un 3% de diferencia del mejor al peor) y en el nuevo chasis de efecto suelo, donde todos empiezan desde cero. El cambio de reglamento beneficiará a las escuderías menores que tendrán mayores posibilidades.
“Estoy muy feliz de confirmar la extensión del contrato con Alpine F1 Team hasta 2022. Me he sentido como en casa en el momento en que regresé a este equipo y me han recibido con los brazos abiertos. Estamos apuntando a resultados más positivos para el resto de esta temporada, pero también de manera crucial a partir del próximo año con los nuevos cambios de regulación que se introducirán en la Fórmula 1. Estoy deseando que llegue el resto de este año y competir junto a Esteban en 2022 para Alpine”, expresó el piloto campeón del mundo en 2005 y 2006 con Renault.