Se ha hablado mucho de la continuidad de Lewis Hamilton en las últimas semanas, pero no ha sido el único futuro que ha estado sobre la mesa en la categoría. Incluso en Mercedes, ya que una de las piezas clave en el dominio de la escudería en los últimos años también ha estado a punto de dejar todo.

Toto Wolff se confiesa y admite que la idea de dejar la Fórmula 1 pasó por su mente. Sin embargo, no era un pensamiento desatado por la coronación de Max Verstappen como campeón del mundo en la última carrera, sino que la decisión ha sido valorada en los últimos meses, tras la intensidad de las últimas temporadas que tuvo a los alemanes en lo más alto de forma indiscutida.

“Fueron diez meses muy difíciles para mí, también mentalmente, di todo durante casi ocho años y me sentí agotado hasta cierto punto. Además, mi contrato estaba por vencer y podría haber vendido mis acciones”, confiesa el director de Mercedes que también es copropietario del equipo.

Pero, dejando a un lado lo que está por venir en 2022, Toto Wolff rememora los peores meses al frente de Mercedes. Perdieron el Mundial de pilotos en favor de Red Bull, pero la marca energética no logró destronarlos del Mundial de Constructores, el cual ganaron por octavo año consecutivo.

“Todo esto derivó en un conflicto interior: ¿Quiero quedarme en la F1? ¿Todavía puedo contribuir? ¿O alguien más puede hacer el trabajo mejor? Pasé casi un año pensando en eso, aunque ‘pensar en eso’ sigue siendo una expresión bastante positiva. Fue una gran cantidad de autorreflexión, también por la presión que sentía. Al final elegí Mercedes y la F1, he encontrado mi lugar aquí”, zanjaba Wolff, ahora seguro de que le queda mucho por vivir en el Gran Circo.