La Fórmula 1 ha tenido tal impulso en materia de popularidad en los últimos años que ahora no hay quien no quiera ser parte del Gran Circo del automovilismo. La búsqueda constante de mercados a los cuales llegar, por parte de la organización es uno de los motivos por los cuales muchos se lanzan al sueño de recibir la competencia.

Y ahora es el turno de, nada más y nada menos, que el Caribe. La región caribeña tuvo un crecimiento enorme en materia de interés por la Fórmula 1. Las llegadas en los últimos años de los mexicanos Sergio Pérez y Esteban Gutiérrez, más la presencia del venezolano Pastor Maldonado, hicieron que el público de estos lares se interesara mucho más por la disciplina.

Y ahora la zona quiere ir por más y tener un Gran Premio que represente la pasión creciente por la velocidad y la adrenalina de los monoplazas más veloces del mundo. Tal es así, que la ciudad colombiana de Barranquilla inició gestiones para construir un circuito semiurbano que cumpla las condiciones para albergar una fecha del calendario oficial.

Este sábado el presidente Iván Duque anunció que ya se encuentra realizando gestiones para que en Barranquilla se lleve a cabo el diseño y elaboración de una pista en las calles de la ciudad, que permita traer por primera vez el Campeonato Mundial de Fórmula 1 a Colombia.

De acuerdo con Jaime Pumarejo, alcalde de Barranquilla, su administración se ha reunido con Liberty Media, dueña de los derechos y administradora de la Fórmula 1, para iniciar las gestiones que permitan un Gran Premio de la máxima categoría del automovilismo mundial en el país cafetero, que supo tener presencia en la parrilla entre 2001 y 2006, con el piloto Juan Pablo Montoya.

El principal inconveniente a la hora de organizar un Gran Premio es esta región, son los elevados costos que esto implica. Por el momento, solo el tradicional Gran Premio de Brasil se mantiene, debido al subsidio del gobierno. En cuanto a los otras fechas americanas, el Gran Premio de México ha podido ver la luz debido al aporte del multimillonario Carlos Slim, mientras que el Gran Premio de Miami (que debutará en 2022), podrá realizarse gracias a la billetera de Stephen Ross, dueño de los Miami Dolphins y del Hard Rock Stadium, en cuyo aparcadero se realizará el circuito.

Según información de la revista Forbes, la implementación del Gran Premio le costaría a la ciudad de Barranquilla alrededor de 971 millones de dólares por un contrato firmado a diez años. Es decir, casi cuatro billones de pesos colombianos. Esta cifra incluye los costos de llevar la F1 por 10 años, una cifra que incluye el precio neto de los derechos para realizar las 10 competencias más los gastos operativos de cada una de ellas.

Los gastos operativos, por cada circuito realizado, cuestan 57.5 millones de dólares al año (unos $228.000 millones) entre seguros, utensilios, barreras, gradas y staff. Al anualizar los costos, el monto total a la tasa de cambio vigente el 21 de enero de 2022 es de 3.857 billones de pesos, un monto cercano al total del presupuesto anual de Barranquilla, que fue de $4.16 billones para el 2022.