Una lucha sin cuartel se está viviendo dentro del seno del equipo Red Bull luego de que Sergio “Checo” Pérez dijera que los títulos obtenidos por Max Verstappen fueron gracias a él, a consecuencia de que el vigente bicampeón mundial de la máxima categoría no lo dejara pasar en las últimas vueltas del GP de Brasil para luchar por el subcampeonato.

Verstappen, por su parte, según rumores de la prensa en Holanda no lo quiso dejar pasar porque según el (Max), “Checo” chocó a propósito en la clasificación al GP de Mónaco en la que finalmente el mexicano se alzó con la victoria en la que dejó unas celebraciones bastante cuestionables.

Para la última carrera de la temporada que se hará en el GP de Abu Dabi tanto como Charles Leclerc como Sergio “Checo” Pérez tienen oportunidades de ser el subcampeón mundial, el primero de los perdedores diría Ayrton Senna Da Silva, tricampeón del mundo y uno de los mejores pilotos de todos los tiempos hasta que la muerte lo sorprendió en 1994.

Si la temporada de la Fórmula 1 terminara hoy el subcampeón del mundo sería el piloto de Móncaco, Charles Leclerc, ya que este ha ganado en tres ocasiones en el Mundial de 2022, tras “solo” dos válidas del mexicano. Este es el principal método para resolver las diferencias de puntos.

Todas las críticas de la sociedad recayeron a Verstappen por ser un mal compañero, ¿pero están bien esas críticas? El genio al volante del Red Bull cargó con toda la responsabilidad de la ineficiencia de Pérez que a pesar de tener un carro superior al Ferrari no ha podido darle caza al caballito italiano.

Quizás, si hubiésemos visto la Fórmula 1 hace par de años con un Rubens Barrichello, un Valtteri Bottas, o un Nico Rosberg no habríamos pensado que ese tipo de pilotos tienen una función en específico, ser el segundo del campeón y esto no tiene motivo para dar vergüenza, estás ayudando a mantener a tu equipo en lo más alto de la competición y te estás ayudando a ti mismo como piloto en garantizar ser la mano derecha del campeón y obviamente permanecer un tiempo más corriendo, porque claro, esto es un negocio y no una película de Rápidos y Furiosos.

Quizás la elección de las palabras de Sergio Pérez no fue la mejor, a ello, se le agrega que tampoco estuvo bien que Max Verstappen se haya negado en ciertamente ayudar a su compañero de equipo, porque mencionar que es su amigo luego de las declaraciones del tapatío es algo muy extraño.

Sin embargo, esto es un deporte que, a pesar de ser de equipos, es individual, las competencias deben ganarse en pista.

Si Red Bull hubiese querido que las cosas marchen mejor en la competencia debieron equilibrar mejor la estrategia en cuanto a los neumáticos, esto sí sería una ventaja para el mexicano que sí ha ayudado al holandés, pero que no tampoco debe agradecerle por los dos campeonatos que tiene en su poder, porque solo de pilotos, no vive el equipo.

¿Debe aceptar que es un piloto escudero?

No, para nada, si Sergio “Checo” Pérez tiene el talento para salir adelante tiene que hacerlo, tal como lo hizo el alemán Nico Rosberg contra el “dictador” Lewis Hamilton a quién le “quitó” un título y se retiró finalmente de la máxima categoría.

Esa es la única razón por la que el mexicano deba seguir en la Fórmula 1, debe ganarse todo dentro de la pistas y no a través de la opinión pública.

Pérez es uno de los más veteranos sin corona dentro de la F1, pero es hora de que comprenda que es el segundo piloto de Red Bull y situaciones como estas volverán a suceder, la única manera que no pase es que se atreva a competirle sin ningún tipo de escusas al bicampeón del mundo Max Verstappen o que no esté en carrera.