La crisis que atraviesa Europa en este momento tras la invasión de Rusia a Ucrania no deja rubro sin afectar. Incluso el deporte, el que nadie puede negar que no sea político también. A las medidas tomadas por la FIFA y la UEFA, también se sumaron las adoptadas por la FIA en el campeonato de Fórmula 1.

Luego de anunciar la cancelación del Gran Premio de Rusia, a disputarse en septiembre en la ciudad de Sochi, hubo muchos movimientos como parte del bloqueo al territorio presidido por Vladimir Putin. Por ejemplo, la escudería estadounidense Haas, que tiene como principal patrocinador a Uralkali, una de las mayores empresas del país ruso, decidió romper relaciones con la marca y quitó toda referencia en su carro y redes sociales.

Pero no sería el único cambio que haría el equipo, ya que el que también corre riesgo de ser removido es uno de sus pilotos, el también ruso Nikita Mazepin. El piloto es hijo de Dimitri Mazepin, dueño de Uralkali, que tras firmar el acuerdo con Haas, puso a Nikita a bordo de uno de los monoplazas para la temporada 2021 de la F1.

Pero tras la crisis que atraviesa el mundo en este momento, el futuro de Mazepin (fue el peor piloto de la parrilla durante la temporada pasada) puede ser oscuro, ya que desde Ucrania pidieron a la FIA que no permita a los pilotos con licencias rusas competir fuera del país.

Uno de sus solicitudes fue “prohibir a todos los que tengan licencias expedidas por la Federación del Automóvil de Rusia y por la Federación del Automóvil de Bielorrusia participar en todas las competiciones fuera de la Federación de Rusia y de la Federación de Bielorrusia”.

La llegada de Mazepin a la parrilla fue uno de los tantos casos de “pilotos de pago”, en el que el conductor llega con un fuerte respaldo de dinero y sponsors detrás, lo que hace difícil de rechazar a los equipos que necesitan ese dinero para desarrollar el automóvil.

Si la FIA acepta este pedido, Mazepin, entre otros, no podrán seguir compitiendo. Incluso el piloto ruso ya tiene sustituto si es que debe bajarse y es el piloto de reserva, el brasileño Pietro Fittipaldi, nieto del bicampeón mundial, Emerson Fittipaldi.

El joven de 25 edad ya debutó en la Máxima a finales de 2020 cuando reemplazó a Romain Grosjean por las consecuencias que tuvo el francés en el terrible accidente en Bahréin el día que su Haas se partió y se incendió.