Esta vez no se pudo. Jasmine Camacho-Quinn falló en un nuevo intento de llevar a Puerto Rico a la cima del atletismo mundial al arribar en el cuarto lugar de la final femenina de los 100 metros con vallas de la Liga Diamante, este jueves en Zúrich, Suiza.
La campeona mundial Tobi Amusan, de Nigeria, cruzó la meta en primer lugar y estableció un nuevo récord para la competencia de 12.29 segundos.
Tia Jones, de Estados Unidos (12.40) y la jamaiquina Brittany Anderson (12.42) ocuparon el segundo y tercer lugar.
La campeona olímpica puertorriqueña, que aspiraba a conseguir su primer título en la Liga Diamante, marcó un tiempo de 12,49 segundos.
Este cuarto lugar conseguido por Jasmine Camacho-Quinn en Zúrich representa la culminación de un año exitoso donde ganó 14 de 20 carreras disputadas.
Apenas horas después de la competencia, la atleta publicó en sus rede sociales un mensaje en el que reflexiona sobre su desempeño en las pistas este año.
“Estoy muy agradecida por todo esta temporada porque me ha enseñado mucho. Pero me ha hecho darme cuenta de que todo esto forma parte de mi trabajo. Los altibajos”, escribió en su cuenta en Instagram.
“Primeros campeonatos mundiales y primera final de la liga de diamantes. ¡La chica ha tenido una larga temporada, desde enero!”, agregó en el post.
Este año fue un contratiempo menor, pero definitivamente me prepararé mentalmente para el próximo año. Hasta la próxima temporada”.
La laureada vallista también deja ver en su mensaje que ha estado lidiando con problemas emocionales.
“Este año estuvo lleno de muchas emociones. Tantas lágrimas. Tantos pensamientos negativos”, escribió.
Manifestó haber aprendido “a lidiar con mis emociones crudas y cómo manejarlas. Aprendí que está bien llorar. Está bien no estar bien. Está bien perdonarte a ti mismo”.
“He estado en terapia durante meses y he aprendido mucho. Sobre mí mismo y el trato con los demás. Aprendí que no todo será perfecto”, reveló la veloz deportistas en un sincero ejercicio de autoreflexión.
Nacida en Carolina del Sur, EE UU, Camacho-Quinn conquistó para Puerto Rico la medalla de oro en Tokio 2020, imponiendo un nuevo récord olímpico de 12.26 segundos.