La nadadora olímpica venezolana Paola Pérez anunció en sus redes sociales que no podrá asistir a la copa previa al Mundial París 2024 debido a que no logró completar el dinero para la compra de los pasajes, lo que le impidió hacer la inscripción en la competencia internacional.
“Por ahora oficialmente no podré participar en la primera copa del mundo, ya que la fina exige en la inscripción contar con el itinerario de vuelo y el tiempo no me alcanzó para completar el dinero y poder hacer la compra de los pasajes“, escribió Pérez en su cuenta oficial en Instagram.
Además, dejó claro que se tomará un descanso en las redes sociales para replantearse su futuro en el deporte.
El pasado mes de febrero, Pérez anunció la venta de uno de los obsequios obtenidos por su participación en Tokio 2020. “Aquí está mi teléfono como nuevo, con todos sus protectores (…) y ese aporte va a contribuir a mi carrera deportiva para los gastos que se vienen en camino (…)“, dijo.
La nadadora de aguas abiertas, a sus 30 años de edad, declaró que estaba algo cansada y deseaba cerrar su carrera profesional con broche de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024.
En Tokio 2020, Paola logró el puesto número 20 en la competencia, al cronometrar 2:05.45 en la prueba de los 10k de nado de aguas abiertas.
Inicios
Paola Pérez nació el 5 de abril de 1991 en Venezuela, compitió en el maratón femenino de 10 kilómetros en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
En 2019, compitió en los eventos femeninos de 5 y de 10 kilómetros en el Campeonato Mundial de Natación de 2019 en Gwangju, Corea del Sur. En el evento de 5 kilómetros terminó en la posición 39 y en el de 10 kilómetros en la posición 42.
El mismo año también compitió en el en el maratón femenino de 10 kilómetros en los Juegos Panamericanos de 2019 en Lima, Perú, terminando en la 11º posición.
De una familia de atletas y deportistas, Pérez emigró hace años de Venezuela porque las condiciones en el país no eran las adecuadas y no tenía posibilidades de prepararse. Esa crítica la dejó muy en claro y fue suficiente para ganarse la mirada de reojo del Estado venezolano.
Quizá el momento en el que quedó evidenciada la falta de apoyo fue hace tres años, cuando sufrió hipotermia en la prueba femenina de 10 kilómetros en la laguna Bujama, en Perú. No tenía un traje de baño de neopreno, necesario para mantener la temperatura corporal, que las autoridades deportivas le debieron garantizar.
Se ha mantenido constante en su crecimiento a pesar de las dificultades que le ha tocado vivir. En enero alcanzó la mejor marca técnica absoluta en el Campeonato Nacional de Verano de Chile y a finales de febrero logró oro en los 5 km del Campeonato Nacional de Aguas Abiertas de la Federación Chilena de Deportes Acuáticos. También consiguió el primer lugar en los 3 km de la categoría Master B.