El boxeo mexicano fue testigo de uno de los momentos más cruciales el pasado 25 de junio, durante la pelea por la unificación de los títulos de la AMB, CMB, FIB, OMB y The Ring del peso wélter femenil, Alma Ibarra le suplicó a su entrenador ya no seguir adelante con la contienda y parar la pelea, pues, suplicó por su vida.
Luego de las controversiales imágenes que regaló la Conquistadora, como también es conocida, decidió ponerle fin a su carrera profesional en el deporte de los puños y guantes para así darle prioridad a su salud mental. Por medio de su cuenta de Facebook, Alma Ibarra publicó una carta en la que explicó por qué ya no siguió su pelea contra Jessica McCaskill y qué la orilló a retirarse del pugilismo profesional de tal forma.
Lo primero que aclaró es que la decisión la tomó de manera personal, pues confesó que desde hace seis meses ya lidiaba con una depresión, incluso antes de la pelea por los cinturones ya había considerado que era tiempo de despedirse del boxeo. Sin embargo, argumentó que fue convencida a continuar debido a la oferta que tenía para convertirse en campeona mundial.
“Desde hace 6 meses entré en una depresión que solo unas 3 personas notaron, me era muy difícil, inclusive solo levantarme de la cama a entrenar y había decidido retirarme… me dejé convencer de que no era lo correcto después de tanto tiempo y esfuerzo y continué dándome una oportunidad”, se puede leer en la carta.
Aunque se esforzó y se preparó para dar la mejor exhibición de su potencial en la pelea por la unificación de los campeonatos ante la púgil estadounidense, sintió que no estaba a gusto consigo misma, hecho que la orilló a abandonar la pelea al inicio del cuarto round.
Así que luego de renunciar a la pelea de manera tan abrupta, defendió el trabajo de su equipo de entrenadores. Aunque consideró que no tenía que dar explicaciones a los demás, sí lo hizo por dos motivos principales que expuso en su carta.
“Lo hago por 2 cosas:
1. Para comprobar una vez más que la salud mental es tan importante como la física, y más en nuestro deporte, y que si sirvo como ejemplo para que alguien, lo tome de la manera que más le beneficie. 2. Para dar la cara por mi equipo que no tiene absolutamente nada de culpa, al contrario, agradezco que aguantaran todo este proceso conmigo sin saber lo que pasaba por mi mente”, explicó Alma Ibarra.
La peleadora originaria de Monterrey, Nuevo León aseguró que su retiro le da “tranquilidad”, cosa que necesitaba para su vida. Por último, pidió que se deje de “romantizar” la idea de que un o una boxeadora necesita “sufrir” para ser alguien exitoso; rectificó su mensaje del bienestar personal ante cualquier situación y de la salud mental.
“Hoy después de 15 años digo adiós al boxeo, un retiro que había postergado por 6 meses y hoy me da la paz y tranquilidad que mi vida necesita, me voy tranquila porque sé que a pesar de todo, siempre estuve picando piedra” La pelea que se realizó en el Tech Port Arena de San Antonio, Texas, EEUU, acabó al tercer round. McCaskill, vigente campeona, dio muestra de su talento con los puños y doblegó la defensa de la mexicana. A pesar de que la pelea recién empezaba, poco antes de que sonara la campana para el cuarto round, Alma Ibarra dialogó con su entrenador.
En la esquina ambos tuvieron una discusión, pues la peleadora regiomontana imploró por rendirse y ya no salir a pelear. Un video captado por DAZN Boxing captó el momento en el que La Conquistadora gritó: “¡Solo quiero llegar viva a mi casa con mi hijo!”. Poco después el entrenador le indicó al réferi que ya no saldrían y se decretó nocaut técnico a favor de la norteamericana.