La gimnasta de Uzbekistan, Oksana Chusovitina, es una muy reconocida figura de 46 años de edad, y es una de las atletas de mayor edad en su categoría en esta edición de los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Ésta está atravesando, nada más y nada menos que sus octavos Juegos Olímpicos como competidora.

Actualmente, Chusovitina es considerada como una leyenda de la gimnasia olímpica, ya que desde siempre, la edad no ha sido un problema para ella. Hace dos décadas, la misma se encontraba sobre la edad promedio de gimnastas, ya que está categoría siempre ha sido dominada por las adolescentes y jóvenes, por la flexibilidad que tienen éstas. Sin embargo, ésta gimnasta ha podido eliminar ese obstáculo de su vía y enfocarse en dar lo mejor de ella cada vez que se presenta en estos grandes escenarios.

En sus 30 años de experiencia, Chusovitina ha ganado 13 medallas mundiales y olímpicas combinadas, incluido un récord de nueve medallas de campeonato mundial en salto, con una de plata en Beijing 2008. Está gran carrera ha tenido momentos en lo que la gimnasta quería terminarla. En el 2009, luego del campeonato mundial de gimnasia, ésta quería retirarse, al igual que en el 2012, pero según contó la misma, siempre llegaba más motivada, y por eso continuó.

Antes de iniciar los Juegos Olímpicos, la gimnasta indicó que ésta será su última aparición en este escenario. Chusovitina tiene un hijo de 22 años, que es más de lo que tienen muchas de las competidoras con las que se enfrentará la uzbeka  en estos juegos. Él es una de las razones por la cual desea retirarse.

Mi hijo tiene 22 años y quiero pasar tiempo con él. Quiero ser mamá y esposa.

Chusovitina se ha preparado para Tokio 2020, en el que participará solamente en un estilo de gimnasia, y competirá contra otras que tienen menos de la mitad de la edad que ella tiene.