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En un emocionante despliegue de habilidad y determinación, Rafael Cabrera y Ramón Vila se alzaron con la medalla de oro en la categoría de dobles masculinos en el Campeonato Superior del Caribe de Tenis de Mesa.
La pareja dominicana, formada por Cabrera y Vila, demostró su supremacía al vencer en un apasionante encuentro por 3 sets a 1 (11-4, 12-10, 4-11, 11-6) a Liván Martínez y René Méndez, representantes de Cuba. La audiencia congregada en el Parque del Este vibró con cada punto disputado, presenciando un duelo que quedará grabado en la memoria de los aficionados al tenis de mesa en la región.
Con este triunfo, la República Dominicana añade una presea de oro a su colección, junto con un par de medallas de bronce en la especialidad de dobles, así como el tercer puesto en la clasificación general por equipos masculinos. Este éxito consolida el dominio de los atletas dominicanos en la disciplina y refleja el arduo trabajo y la dedicación de los competidores.
El camino hacia la gloria no fue fácil para Cabrera y Vila, quienes en la semifinal se impusieron con autoridad por 3-0 al dúo local compuesto por Eduardo Darley y Samuel Gálvez. En una demostración de habilidad y determinación, superaron todos los obstáculos en su búsqueda del título, estableciendo su posición como referentes indiscutibles del tenis de mesa caribeño.
El Campeonato Superior del Caribe de Tenis de Mesa no solo ha sido un escenario para la competencia deportiva, sino también un lugar donde se ha forjado lazos de amistad y cooperación entre los países participantes. La camaradería y el espíritu deportivo han sido los verdaderos protagonistas de este evento, que ha reunido a los mejores talentos de la región en un ambiente de sana competencia y compañerismo.
La celebración del Campeonato Superior del Caribe de Tenis de Mesa ha sido un éxito rotundo, destacando el talento y la pasión de los atletas que han competido en cada categoría. Con la mirada puesta en el futuro, la comunidad del tenis de mesa en la región se prepara para enfrentar nuevos desafíos y alcanzar nuevas metas, con la certeza de que el espíritu competitivo y la camaradería seguirán siendo los pilares de este deporte.