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Los Cardenales de Arizona son un equipo que desde que eligieron a Kyler Murray se le vincula, al éxito y al llegar a postemporada y avanzar en ella. Su primera temporada, el equipo no estaba lo suficiente armado para llegar lejos y tuvieron récord de 5-10-1, quedándose fuera, el segundo año se quedarían fuera con marca de 8-8, el tercer año ya si llegarían a playoffs pasando como 2do en su conferencia logrando 11 victorias y 6 derrotas. Murray tendría que enfrentarse a los Rams en primera ronda y se iría eliminado perdiendo 11-34, logrando apenas 137 yds, siendo interceptados dos veces y promediando solamente 4 yardas por pase.
Antes de comenzar la temporada, su receptor principal Deandre Hopkins fue suspendido seis juegos por dopaje. Los Cardinals conseguirían en la temporada baja a Marquise Brown vía cambio y en el transcurso de la temporada a Robbie Anderson vía traspaso también. El equipo en la actualidad tiene récord de 4-9, viéndose mal en ambos aspectos del juego tanto defensivo como ofensivo, poniendo en duda en múltiples ocasiones si el entrenador en jefe, Kliff Kingsbury debería mantener su trabajo.
Los Cardinals se enfrentaban a unos Pats que están en la lucha de avanzar a playoffs, cuando Murray quedó tendido tras caer por una lesión sin contacto luego de una carrera de 3 yardas hacia la derecha en la tercera jugada ofensiva del partido. Murray tuvo que ser atendido rápidamente por el personal medico del equipo y se determinó que no podría seguir y fue sustituido por el veterano, Colt Mccoy.
The buckle in his knee and the non-contact for Kyler Murray screams ACL
Hope I’m wrong
pic.twitter.com/c9i6aWDYWS— Dr. Evan Jeffries, DPT (@GameInjuryDoc) December 13, 2022
El conjunto de Arizona terminaría perdiendo el encuentro 13-27 y el día posterior al juego, se confirmaría que el QB se perdería lo que resta de la temporada, con una rotura de ligamento. Murray le dice adiós a una temporada que a nivel colectivo ha sido un desastre y a nivel personal tampoco ha sido la mejor, ha logrado lanzar 14 TD (empatado como QB 18 en la liga en este departamento) ha sido interceptado en siete ocasiones, tiene 2,368 yds por aire, siendo rankeado como el QB número 20 en la liga en este aspecto y con un Quaterback rating de 51.2 que lo sitúa en el puesto 21 dentro de los mariscales.