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Andy Murray sabe lo que es el éxito, pero ahora acaba de experimentar un gran revés como entrenador de su pequeña hija, Edie, de 5 años, la cual ha desistido, al menos por ahora de que su famoso padre sea su coach.

Aunque se lee algo fuerte, en realidad, el tenista publicó en sus historias de Instagram una carta que le envió su hija, luego de su primer entrenamiento juntos, en el cual Murray fue el entrenador de la niña, la misiva es una combinación de ternura con humor, pero también derrota.

“Mi primera incursión en el mundo del coaching ha terminado en desgracia”, escribió Murray. “Mi hija de 5 años ha renunciado diciéndome: ‘No quiero jugar más, te pones demasiado cerca de mí”, agregaba junto a la imagen de la nota.

Aunque la niña destaca que la nota fue escrita con mucho amor, a pesar de colocar una equis roja gigante sobre su dibujo de ella jugando tenis. Afortunadamente su padre se ha tomado la situación con bastante humor.

El escocés apareció por última vez en la cancha en el Masters de Montecarlo cuando entramos en la temporada de tierra batida. Murray, que nunca ha ganado el título en el principado, fue eliminado en la primera ronda por el australiano Alex de Minaur, y luego afirmó que esa actuación fue “una de las peores de mi carrera”.

Edie es la tercera hija de Murray con su esposa Kim, aunque aún no hay que perder la esperanza ya que su hija mayor Sophia comenzó a practicar el tenis, pero ahora parece que ahora está más interesada en los animales, según contó el propio tenista en una entrevista, pero su interés en el tenis quizás podría volver.