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Novak Djokovic regresó al Abierto de Australia después de toda la controversia por su deportación ante la negativa de vacunarse en la edición anterior, para derrotar Roberto Carballés 6-3, 6-4 y 6-0 en dos horas
“Aprecio muchísimo el ambiente de hoy. Me he sentido bienvenido en la pista, sobre todo por parte de la comunidad serbia, que es muy grande aquí en Australia y que me ha acogido de una manera increíble. He sentido muchísimo apoyo y muchísimo amor. No podía pedir un mejor inicio de torneo en cuanto a lo que el apoyo se refiere”, dijo el serbio tras el triunfo.
Djokovic quien tenía un vendaje en su pierna por las molestias en el muslo que surgieron desde el torneo de Adelaida en Australia, demostró que aunque su pierna no está al 100 por ciento, definitivamente no será un impedimento.
“La pierna está bien. No está al nivel ideal, pero se acerca poco a poco. La de hoy fue una prueba realmente buena. Sinceramente, no he tenido mucho entrenamiento en los últimos días a nivel tenístico. Esperaba con todas mis fuerzas que las cosas fueran bien desde el primer al último punto, lo que ha acabado ocurriendo. Estoy contento por haberme sentido mejor conforme avanzaba el partido. El tercer set fue magnífico. Esa es una buena señal. En los dos primeros sets estaba en cierto modo probando la pierna. Al principio estaba un poco rígido, también mentalmente, porque quería proteger algo que me ha molestado en los últimos diez días. Necesité algo más de tiempo para meterme de lleno en el partido y moverme con mayor facilidad”, explicó en la conferencia de prensa.