El mundo del tenis sigue en vilo todo lo relacionado a la situación de Novak Djokovic con el gobierno de Australia, ya que la temporada 2022 está llegando a su fin y pronto se empezará a diagramar el circuito 2023, siendo el Abierto australiano una de las principales atracciones del inicio del año. Y aún no se sabe si el tenista serbio podrá competir.

Para hacerlo, deberá dársele de baja el veto de tres años que el propio gobierno le dio al haber ingresado a territorio australiano sin vacunarse y sin conseguir la exención médica que le permitía hacerlo y poder competir. Por lo tanto, el tenista fue deportado con la prohibición mencionada.

Sobre esta situación, el tenista estadounidense Christopher Eubanks (número 137 del ranking) declaró en la prensa su postura sobre lo acontecido este año y se mostró a favor de que Djokovic juegue en el país oceánico: “Espero que Novak pueda jugar el Open de Australia. Creo que lo que pasó fue un circo, pero en gran parte no fue culpa de Djokovic. Creo que la mayor parte de culpa la tienen Tennis Australia y el gobierno australiano, por haber transmitido información que a veces no era correcta. Novak vino, pensaba que podría competir y como se le dio una información incorrecta, finalmente fue deportado”, analizó.

Solo queda esperar que Nole pueda quedar exceptuado de la sanción que le impusieron este año, ya que Australia ya no exige que los visitantes estén vacunados para poder ingresar al territorio. La esperanza que tiene el serbio radica en que a mediados de este año hubo elecciones en Australia y la totalidad del gobierno cambió sus nombres, por lo que los nuevos mandatarios pueden revisar el caso a favor del tenista.

El primer torneo de Grand Slam comienza el 16 de enero y tiene en Djokovic a su máximo ganador, con nueve conquistas del serbio. De participar y ganarlo, volvería a igualar a Rafael Nadal en cantidad de majors obtenidos con 22 títulos.