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Regresa la polémica y a simple vista, otra vez parece algo exagerado, hasta un delirio, dirían muchos, pues el altar sagrado de los mejores relevistas de Grandes Ligas está reservado desde rato para tres inmortales como lo son Mariano Rivera, Trevor Hoffman y Lee Smith.

Esa sería la primera disyuntiva obviamente, después para reafirmar esto, incluso emergen otras figuras, igual de grandes, Francisco Rodríguez, John Franco y Billy Wagner, cerrando el listado de agraciados que han logrado rebasar la mítica barrera de los 400 rescates.

Chapman

Hacia allí apuntaba Aroldis Chapman cuando regresó a Manhattan a finales de 2016, amparado en un lujoso contrato de 5 años y 85 millones de dólares, siendo considerado por buena parte de los entendidos en aquel entonces, como el mejor apagafuegos de MLB.

En este punto, tal como ocurre ahora, como sucedía por aquellos días, pensar en Chapman como el mejor relevista de la historia es una locura, una especie de utopía que podría tener cabida en la mente de los fanáticos más acérrimos, sin embargo, tal como sucede en la vida misma, emergen matices que le dan cierta notoriedad al tema.

Cuestión de hechos

Chapman no es el mejor relevista de la historia, tiene 316 juegos salvados, por momentos pintaba para unirse a aquel selecto grupo del que hablamos antes, el de los más de 400 rescates, pero sobrevino el calvario con los Yankees de Nueva York, perdió velocidad, apareció el descontrol, simplemente no volvió a ser el mismo de aquellas temporadas en 2012, 2013 y 2014.

Ahora, desde su irrupción en Las Mayores allá por 2010, cuando vistiendo la franela de los Rojos de Cincinnati sorprendió al mundo del béisbol con su prominente bola rápida, cómodamente por encima de las 100 millas por hora; desde aquel entonces, solo Craig Kimbrel y Kenley Jansen podrían pugnar por la tan mentada hegemonía.

Están otros, Andrew Miller, Zach Britton, Wade Davis y en el contexto actual, descolla el imponente Edwin Díaz, pero sin lugar a dudas, a pesar de los años, de las dudas y todos esas trabas que impone el tiempo, Chapman regresa a la conversación como el gran referente entre los apagafuegos en el referido lapso de tiempo.

Los números y una perspectiva diferente sobre el tema

En este contexto, mientras el cubano intenta relanzar su carrera en Kauffman Stadium  con los Reales de Kansas City y al instante de darle forma a este texto, registra forja de 1-2, con efectividad de 3,68 y 23 ponches en 14,2 tramos de labor, en este contexto la estadística, a veces fría, aflora para darnos una noción  diferente del asunto.

Como lo lee, tal como se muestra en Baseball- Reference y como refiere un artículo del portal Swing Completo con un mínimo de 650 entradas lanzadas, Aroldis Chapman es el cerrador con mejor promedio de ponches por cada nueve entradas en todos los tiempos.

Con una media de 14,7 chocolates, producto de 1068 ponches en 654,2 marcos, el antillano deja en el camino a figuras ya mencionadas como Craig Kimbrel (14,4) , Kenley Jansen (12,9) y Billy Wagner con 11,9.

¿ El mejor de la historia?

La perspectiva trasciende, son números que hablan por sí solos y en este minuto, a sus 35 años, cuando muchos lo daban por muerto, Aroldis Chapman puede tener un  motivo suficiente para seguir esculpiendo su legado.

Entonces,  cabe preguntarse,¿ puede estar determinada la efectividad de un relevista por su promedio de ponches? y otra vez volvemos al punto, ¿es Chapman el mejor apagafuegos de la historia?, ¿usted qué cree?