Your browser doesn’t support HTML5 audio

En la vibrante atmósfera del Yankee Stadium, durante el quinto episodio del juego del martes, el dominicano Luis Gil se enfrentaba a un momento crítico. Con las bases llenas y los Mets presionando, Gil mostró una confianza inquebrantable, confiando en una nueva arma en su repertorio para salir del apuro. Después de una dura lección en el Citi Field el 26 de junio, donde fue castigado por los Mets, Gil buscó la sabiduría de un antiguo compañero, Luis Severino.

El Consejo de un Veterano

Luis Severino, conocido por su experiencia y habilidades en el montículo, respondió al llamado de Gil con una serie de videos y consejos sobre cómo perfeccionar su agarre del slider. Este pitcheo, que había sido problemático en su anterior enfrentamiento con los Mets, se convirtió en el enfoque de su entrenamiento. Severino explicó: “En la última apertura ante nosotros, los pitcheos rompientes no estuvieron bien. Le di algunos consejos, incluyendo uno que me ha ayudado a lanzarlo bien de verdad ahora. Fue al bullpen, lo intentó y me dijo que ha sido increíble. Estoy contento por él”.

Resultados en el Campo

El resultado de este nuevo enfoque no tardó en hacerse evidente. En su enfrentamiento más reciente contra los Mets, Gil ponchó a seis bateadores y permitió solo una carrera en cinco entradas. Aunque el juego eventualmente se decidió por un jonrón de dos carreras de Jeff McNeil en el sexto capítulo, la actuación de Gil fue un claro indicio de su mejoría.

“Severino es alguien a quien siempre he admirado, desde que estuvo aquí y ascendió por esta organización”, comentó Gil. “Es un lanzador con más experiencia que yo. Tiene algunos conocimientos que me puede ofrecer. Los tomé en cuenta y los puse en práctica aquí con nuestro coach de pitcheo [Matt Blake]. Estoy obteniendo muy buenos resultados con ese lanzamiento”.

Un Nuevo Enfoque en el Montículo

Durante esta salida, por segunda vez consecutiva, Gil lanzó más sliders (40) que rectas (31), complementando su actuación con 20 cambios de velocidad. Este cambio en su estrategia generó cinco swings en blanco y ocho strikes cantados con el slider, incluyendo cuatro ponches culminados con este lanzamiento.

Severino, desde el dugout, observó con orgullo cómo su consejo daba frutos. “Le mostré cómo manipularlo y luego de eso, parece que ha estado bien venenoso”, comentó Severino. “No sé cómo no fue convocado al Juego de Estrellas. Está teniendo una gran temporada. Espero que pueda continuar teniéndola”.

El Camino de Regreso

Para Gil, de 26 años, la temporada había comenzado de manera dominante. En sus primeras 14 aperturas, acumuló un récord de 9-1 y una efectividad de 2.03 hasta el 14 de junio. Sin embargo, un trío de difíciles salidas contra los Orioles, Mets y Rojos resultó en 16 carreras permitidas en 9.2 innings, poniendo a prueba su confianza y habilidades.

Con la reciente ayuda de Severino, Gil parece haber encontrado nuevamente su ritmo. Sus actuaciones contra los Medias Rojas y los Orioles en julio, donde ponchó a nueve y siete bateadores respectivamente, son testimonio de su recuperación. Este resurgimiento no solo destaca su talento, sino también su capacidad para adaptarse y mejorar bajo presión.

El renovado slider de Gil no solo representa una mejora en su arsenal, sino también una muestra de su potencial y determinación. Mientras avanza la temporada, los Yankees y sus fanáticos tienen razones para estar emocionados por lo que Gil puede lograr. Con la guía de veteranos como Severino y el apoyo del cuerpo técnico, el joven lanzador está preparado para seguir brillando en el montículo.

En resumen, Luis Gil ha demostrado que, con dedicación y el consejo adecuado, es posible superar los desafíos y recuperar el camino hacia el éxito. Su historia es un recordatorio del poder del trabajo en equipo y la importancia de aprender de aquellos que han recorrido el camino antes.

MLB