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En el béisbol, hay momentos que quedan en la memoria por su dramatismo, otros por su impacto en el juego, y algunos simplemente por lo insólitos que resultan. Willson Contreras protagonizó uno de estos últimos el pasado sábado, cuando, en un intento desesperado por no violar el reloj de pitcheo, terminó masticando la cinta de su bate en pleno turno al bate.
La escena, que rápidamente se hizo viral en redes sociales, ocurrió en la tercera entrada del partido entre los St. Louis Cardinals y los Minnesota Twins. Contreras, quien ahora alterna entre la receptoría y la primera base, se encontraba en cuenta completa y sin más tiempos fuera disponibles. En ese momento, notó que la cinta del mango de su bate comenzaba a despegarse. Con el tiempo en su contra y sin otra alternativa, tomó una decisión poco convencional: arrancó la cinta con los dientes y, en lugar de desecharla, la masticó para no arriesgarse a recibir un strike automático.
Un sabor difícil de olvidar
“Fue un mal sabor, realmente malo”, confesó Contreras tras el partido con una risa nerviosa. “No intento ponerle [resina o spray adhesivo] a mi bate, pero fue asqueroso. Un mal sabor.”
A pesar de su esfuerzo por evitar la penalización, el turno no terminó de la mejor manera para él, ya que se ponchó en el siguiente lanzamiento. Sin embargo, el receptor de los Cardinals prefirió verlo desde otra perspectiva:
“Con este reloj, tienes que hacer cosas que están fuera de tu control, y tuve que hacer eso en lugar de recibir un strike por tiempo”, explicó Contreras. “Bueno, de todos modos me ponché, pero prefiero hacerlo bateando que por el reloj.”
Las reglas actuales de la MLB permiten solo un tiempo fuera por turno al bate, y los bateadores deben estar listos y atentos al lanzador antes de que el cronómetro marque los 8 segundos restantes. En ese momento, el reloj mostraba 11 segundos, por lo que el dominicano apenas tuvo tiempo para reaccionar.
Un inicio de temporada complicado
Si bien la acción de Contreras fue un tema de conversación divertido, su rendimiento ofensivo no ha sido motivo de celebración. Tras un sólido entrenamiento primaveral, el veterano receptor ha tenido dificultades en los primeros encuentros de la temporada regular, registrando un 0 de 9 con cinco ponches en sus primeros dos juegos.
Aun así, su buen humor no ha desaparecido. Después del juego, bromeó con la posibilidad de repetir la acción si el resultado hubiese sido distinto:
“Oh man, si conecto un jonrón después de eso, lo hago en cada turno”, dijo entre risas.
El impacto del reloj de pitcheo en los jugadores
Más allá del episodio particular de Contreras, su incidente pone de manifiesto el impacto que el reloj de pitcheo sigue teniendo en los jugadores, incluso después de una temporada de adaptación. Desde su implementación en 2023, la norma ha obligado a bateadores y lanzadores a acelerar su ritmo de juego, eliminando los largos rituales que antes eran parte de la dinámica en el plato.
Aunque la mayoría de los jugadores han encontrado maneras de ajustarse, casos como el de Contreras muestran que todavía hay momentos en los que el tiempo se convierte en un enemigo implacable. En situaciones de presión, cada segundo cuenta, y decisiones tan inusuales como masticar la cinta del bate pueden ser la única salida.
Mientras Contreras espera mejorar su desempeño en el plato en los próximos juegos, una cosa es segura: su curioso momento en el partido ante los Twins quedará registrado como una de las anécdotas más extrañas de la temporada 2025.