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La eliminación de la Selección Colombia en los cuartos de final del Mundial Femenino Sub-20 dejó más preguntas que respuestas. Como anfitrionas, las expectativas estaban por las nubes, y con un equipo plagado de talento joven, muchas miradas apuntaban a la gran figura del fútbol femenino nacional: Linda Caicedo. La estrella del Real Madrid Femenino y capitana del equipo colombiano era vista como la gran esperanza, pero el desenlace fue un duro golpe. En un deporte donde las derrotas son parte del aprendizaje, el término “fracaso” ha resonado en el entorno, aunque su uso sea controvertido.

En Colombia, el fútbol se vive con pasión, pero también con exigencias. No cumplir con las expectativas, especialmente siendo anfitrión, ha dejado una amarga sensación de oportunidad desperdiciada. Caicedo, a sus 19 años, llegaba al torneo como una de las grandes promesas. Capitaneó al equipo en todos los partidos, mostrando destellos de su calidad y liderazgo. Sin embargo, el partido contra Países Bajos en cuartos de final fue un punto de inflexión.

Pese a su destacada actuación en el encuentro, siendo clave en la gestación de los dos goles de Karla Torres, el equipo neerlandés logró igualar en momentos cruciales, lo que llevó el partido a tiempo suplementario y, finalmente, a la tanda de penales. A lo largo del encuentro, Caicedo tuvo varias oportunidades claras de definir el partido a favor de Colombia, pero la suerte no estuvo de su lado. Desde el minuto dos hasta el tiempo añadido, Caicedo dispuso de varias ocasiones que pudieron cambiar la historia, pero la falta de precisión en los momentos decisivos la condenó a ser el centro de las críticas.

Cuando llegó la tanda de penales, la jugadora del Real Madrid no tuvo la oportunidad de lanzar su tiro, ya que tres compañeras fallaron antes de que ella pudiera hacerlo, sellando una dolorosa eliminación con un marcador de 0-3 en los penales.

El papel de Caicedo bajo la lupa
A pesar de su innegable talento, la condición de capitana y líder del equipo la puso en el foco de los comentarios más duros. Algunos fanáticos y medios locales no dudaron en señalar que Caicedo no apareció en los momentos clave y que, como líder, debió tomar la iniciativa en la tanda de penales. Se le reprochó su falta de gol y su incapacidad para brillar en los instantes decisivos, estableciéndose injustas comparaciones con figuras como Luis Díaz, quien ha enfrentado críticas similares en la selección masculina.

 

Pero sería injusto apuntar solo a Caicedo cuando las causas de la eliminación son más profundas. La gestión del técnico Carlos Paniagua fue cuestionada por hacer solo dos cambios en un partido que duró más de 120 minutos, mientras que errores defensivos permitieron los goles rivales en momentos cruciales. A eso se sumaron las fallas en la tanda de penales por parte de jugadoras como Gabriela Rodríguez, Liz Katerina Osorio y Juana Ortegón, que no ejecutaron con la convicción necesaria para avanzar.