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Desde la creación de la Copa América, el torneo más importante de selecciones de fútbol en América del Sur, varias finales han capturado la atención del mundo futbolístico. Entre ellas, cinco han culminado con la emoción y tensión de la definición desde el punto penal, marcando momentos memorables en la historia del deporte en la región.
La primera ocasión en que se definió una final de Copa América por penales fue en 1975, cuando Perú venció a Colombia 1-0 en un partido de desempate, tras un empate en el tiempo reglamentario. Este resultado no solo consagró a Perú como campeón, sino que estableció un precedente emocionante para futuras ediciones del torneo.
Veinte años después, en 1995, Uruguay y Brasil protagonizaron una final intensamente disputada que terminó en empate 1-1 luego de los 90 minutos reglamentarios. En la definición por penales, Uruguay emergió victorioso al vencer a Brasil 5-3, asegurando así su título número 14 en la Copa América.
En el 2004, la rivalidad histórica entre Brasil y Argentina alcanzó su punto álgido en la final del torneo. Después de un empate 2-2 durante el tiempo regular, Brasil se impuso 4-2 en la definición por penales. Este encuentro no solo destacó por su nivel de juego, sino también por la intensidad emocional que caracteriza los enfrentamientos entre estos dos gigantes del fútbol sudamericano.
La edición de 2015, celebrada en Chile, fue testigo de otro emocionante desenlace desde el punto penal. En un partido que terminó sin goles después de los 90 minutos y el tiempo extra, Chile superó a Argentina 4-1 en la tanda de penales. Este triunfo no solo otorgó a Chile su primer título de Copa América, sino que también consolidó su lugar en la historia del fútbol continental.
Finalmente, en la edición consecutiva de 2016, Chile y Argentina se encontraron nuevamente en la final, repitiendo la definición desde el punto penal después de un empate 0-0 en el tiempo regular y extra. Chile triunfó nuevamente en la definición por penales, esta vez por 4-2, defendiendo con éxito su título y consolidando su estatus como uno de los equipos más formidables de la región.
Estos momentos destacados no solo han definido campeones y subcampeones, sino que también han añadido capítulos inolvidables a la rica historia de la Copa América. Con cada edición, la emoción y el drama de los penales continúan capturando la imaginación de aficionados y jugadores por igual, asegurando que el legado de este torneo perdure en la memoria futbolística de América del Sur y más allá.