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El Real Zaragoza ha encontrado a su nuevo líder en el banquillo. A falta de los últimos trámites contractuales, Gabi Fernández será oficializado como nuevo entrenador del conjunto blanquillo, iniciando una etapa que llega en un momento de máxima tensión para la entidad.

El exmediocampista, que aún dirige al Getafe B, ha dado el visto bueno para asumir el desafío de dirigir a un equipo que se encuentra al borde del abismo en LaLiga Hypermotion. Con apenas dos puntos de margen sobre la zona de descenso, el Zaragoza busca una reacción inmediata tras la destitución de Miguel Ángel Ramírez y del director deportivo Juan Carlos Cordero.

Gabi, quien ha vivido grandes momentos en La Romareda como futbolista, vuelve a la casa donde dejó huella, esta vez con el deber de enderezar el rumbo y evitar un desastre deportivo que pondría en jaque el futuro del club.

De Getafe a Zaragoza: un salto a su primera gran oportunidad

Este mismo domingo, Gabi dirigió a su equipo en la victoria 1-3 ante el Tenerife B, en lo que parece haber sido su último partido con el filial azulón. Tras el encuentro, regresó de inmediato a la península para estar cuanto antes en Zaragoza y asumir su nueva responsabilidad.

Aunque la firma de su contrato aún no se ha hecho oficial, todo está encaminado para que mañana mismo se ponga al frente del equipo. Sus agentes trabajan en los últimos detalles para concretar un acuerdo que marca su primera gran experiencia profesional en los banquillos tras haber trabajado en la cantera del Atlético de Madrid y en las categorías inferiores del Getafe.

A pesar de las dificultades que enfrentó en su última etapa con el Getafe B, donde le arrebataron piezas clave del equipo como Coba y John Patrick, Gabi logró mantener a su conjunto en puestos de playoff en la Segunda RFEF. Su capacidad para sacar rendimiento de plantillas limitadas ha sido un factor clave para que Zaragoza apueste por su figura en este momento delicado.

Un viejo deseo que ahora se cumple

No es la primera vez que el Zaragoza piensa en Gabi para su banquillo. Ya en el pasado, la directiva maña sondeó su fichaje tras la salida de Víctor Fernández, aunque finalmente la apuesta recayó en Miguel Ángel Ramírez.

Sin embargo, con la crisis deportiva agravándose y tras un nuevo contacto por parte del club, Gabi no ha dudado en aceptar el reto. La conexión emocional con el equipo, la urgencia de la situación y la confianza en sus propias capacidades han pesado en su decisión.

Su llegada no solo significa un cambio de entrenador, sino un mensaje claro a la afición: el Zaragoza apuesta por alguien que siente los colores, conoce el club desde dentro y está dispuesto a luchar por recuperar la identidad del equipo.

El sueño del Getafe, en pausa

Aunque su nombre ha sonado en varias ocasiones para dirigir al primer equipo del Getafe, Gabi ha optado por esperar su oportunidad en el club azulón y enfocarse en este nuevo desafío.

La relación con Ángel Torres, presidente del Getafe, es inmejorable, y si bien en otro contexto habría sido tentador quedarse en el equipo madrileño, la urgencia del Zaragoza y la posibilidad de dar el salto definitivo a la élite pesaron más en la balanza.

Ahora, el desafío es enorme: tomar un equipo desorientado, revitalizar a un vestuario golpeado y encontrar la fórmula para sumar los puntos necesarios que aseguren la permanencia. Para Gabi Fernández, esta no es solo una oportunidad de crecimiento, sino un desafío personal para demostrar que está listo para la élite de los banquillos.