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La igualdad 1-1 ante Talleres dejó un sabor amargo en Núñez. Si bien River Plate continúa en la cuarta posición de la Zona B del Torneo Apertura de la Liga Profesional, su lugar en los playoffs aún no está asegurado y la recta final promete ser un verdadero campo minado. Con solo tres fechas por disputar, el equipo de Marcelo Gallardo deberá dar el máximo para sostener su lugar entre los cuatro mejores y, si es posible, escalar posiciones para tener la ventaja de definir en casa.
Actualmente, el Millonario suma 22 puntos y está por debajo de Independiente (28), Rosario Central (25 y con un partido menos) y San Lorenzo (25). Su inmediato perseguidor, Deportivo Riestra, quedó a tres unidades tras caer en esta jornada, aunque Platense podría alcanzarlo si vence a Rosario Central en el cierre de la fecha 13. Lanús, más atrás, aún mantiene chances matemáticas si consigue una victoria ante Godoy Cruz.
El formato que complica a River
El diseño del torneo Apertura convierte cada punto en oro. Clasifican a la próxima fase los cuatro primeros de cada zona, y quienes terminen en esa posición jugarán los octavos de final con ventaja de localía. En un certamen tan parejo, definir en el Monumental puede ser la diferencia entre avanzar o despedirse.
Por eso, no es lo mismo terminar cuarto que quinto. La cuarta plaza permite recibir al rival de la Zona A en casa. Si hoy se cerrara la fase regular, River se mediría ante Estudiantes de La Plata en el Monumental. Sin embargo, la tabla aún puede cambiar, ya que el Pincha podría ser desplazado si Central Córdoba vence a Huracán este lunes.
Los tres partidos que definirán todo
Lo que viene para River no es sencillo. En la fecha 14 visitará a Gimnasia de La Plata, luego tendrá el esperado superclásico ante Boca como local en la jornada 15, y cerrará la primera fase recibiendo a Vélez. Tres partidos exigentes, donde no solo estará en juego la clasificación, sino también la posibilidad de llegar mejor posicionado al mata-mata.
La clave estará en sumar al menos seis puntos para no depender de otros resultados. Si bien todo parece indicar que River tiene chances reales de meterse entre los cuatro, una caída ante alguno de sus próximos rivales podría complicar seriamente su panorama y hacerlo jugar de visitante en los cruces definitorios… o peor: dejarlo afuera.
El sprint final se vive al rojo vivo
Con el margen reducido y rivales que aprietan desde atrás, River está obligado a mostrar su mejor versión en las últimas tres jornadas del Apertura. La ilusión sigue intacta, pero las estadísticas no lo favorecen: el equipo perdió puntos clave en casa y ahora está forzado a ganar para no hipotecar su futuro. Todo o nada, con el Monumental como escenario y la tabla como juez.
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