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Thiago Ezequiel Almada, nacido el 26 de abril de 2001 en Ciudadela, Buenos Aires, se ha convertido en uno de los nombres destacados de la nueva camada de futbolistas argentinos. Con un pasado humilde en el barrio Fuerte Apache y una carrera que lo llevó a consolidarse primero en Vélez Sarsfield, el talentoso mediocampista ahora tiene la gran responsabilidad de comandar el mediocampo de la selección argentina como titular en su próximo enfrentamiento contra Venezuela por las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026.

Un ascenso meteórico desde Vélez a la MLS

Almada debutó en la Primera División de Argentina con Vélez Sarsfield en agosto de 2018, y rápidamente se ganó un lugar como una de las promesas más brillantes del fútbol local. A pesar de su juventud, sus actuaciones lo llevaron a ser el jugador más joven en la historia del club en anotar de penal. Su capacidad para generar juego y su destreza técnica despertaron el interés internacional, lo que culminó en su fichaje por el Atlanta United de la MLS por 16 millones de dólares, convirtiéndolo en la compra más cara de la liga.

Durante su paso por el club estadounidense, Almada no solo justificó su inversión con goles y asistencias, sino que fue elegido el mejor fichaje del año en 2022, destacándose como uno de los jugadores más valiosos del torneo.

Botafogo y el salto a la titularidad en la selección
En su nuevo desafío con Botafogo en el Campeonato Brasileño de Serie A, Almada continúa demostrando su calidad y ahora ha logrado afianzarse como una pieza clave en el equipo de Lionel Scaloni. Su debut con la selección mayor en 2022, durante un amistoso ante Honduras, marcó el inicio de su aventura internacional. Luego, fue convocado para el Mundial de Catar 2022, sumando minutos en la fase de grupos y consagrándose campeón del mundo junto a sus compañeros.

Ahora, con un papel protagónico en la Albiceleste, Almada tendrá la oportunidad de demostrar todo su potencial en un contexto más exigente: las Eliminatorias Sudamericanas, donde Argentina busca asegurar su participación en el próximo Mundial. Frente a Venezuela, será la primera vez que el joven mediocampista arranque como titular, un hito más en su meteórica carrera.

La mirada puesta en el futuro
Con tan solo 23 años, Almada se perfila como una de las figuras que podrían liderar a la selección argentina en los años venideros. Su versatilidad en el campo, combinada con su capacidad para desequilibrar y aportar goles desde el mediocampo, lo posicionan como uno de los talentos más emocionantes de la actual generación.

El partido frente a Venezuela será una prueba crucial para Almada, quien buscará consolidarse como el conductor del equipo y continuar escribiendo su historia con la celeste y blanca.

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