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Carolina Marín se encuentra en una encrucijada crucial en su camino hacia el oro en los Juegos Olímpicos de París 2024. La campeona olímpica de Río 2016, quien ha regresado a la competición tras una lesión que le impidió participar en Tokio 2020, está a punto de disputar los cuartos de final del torneo individual de bádminton. Su adversaria será la japonesa Aya Ohori, una jugadora emergente que ha demostrado su valía en el circuito internacional.
Marín, de 31 años, ha demostrado un gran nivel en este torneo, superando a la estadounidense Zhang Beiwen en un intenso partido de octavos de final con un marcador de 12-21, 21-9 y 21-18. La onubense, que ha sido una figura dominante en el bádminton internacional, busca volver a estar en el podio y conseguir su segundo oro olímpico, tras su memorable victoria en Río 2016.
Para alcanzar las semifinales y mantener vivas sus aspiraciones de medalla, Marín debe enfrentarse a Ohori, quien se ha consolidado como la octava cabeza de serie. La japonesa ha demostrado un notable desempeño reciente, con una victoria ajustada sobre la singapuresa Yeo Jia Min por 11-21, 21-14 y 24-22 en los octavos de final. Ohori ha mostrado un progreso significativo, lo que la convierte en una oponente peligrosa.
¿Cuáles son las claves para tener en cuenta?
- Marín deberá imponer su estilo de juego y mantener un ritmo alto, evitando que Ohori pueda dictar el flujo del encuentro. La capacidad de Marín para dictar el ritmo será fundamental para desestabilizar a su oponente.
- Ohori ha demostrado ser una jugadora flexible y resistente, por lo que Marín tendrá que estar preparada para ajustar su estrategia en función de cómo se desarrolle el partido. La habilidad para cambiar de táctica a mitad del encuentro podría ser decisiva.
- Un servicio efectivo y una recepción sólida permitirán a Marín controlar los intercambios desde el inicio de cada punto. Minimizar los errores en estas áreas será crucial para mantener la presión sobre Ohori.
- La experiencia de Marín en grandes escenarios será una ventaja significativa. Sin embargo, manejar la presión de los cuartos de final y el deseo de redención tras su ausencia en Tokio será un factor importante para mantener su nivel de juego.
El enfrentamiento entre Marín y Ohori promete ser una batalla emocionante, y el resultado determinará quién avanza a las semifinales en busca del sueño olímpico. La estrategia y la preparación de Marín serán clave para asegurar su lugar en el podio y continuar su legado en el bádminton mundial.