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El proyecto de Andretti Global, que en su momento enfrentó una negativa inicial para ingresar a la Fórmula 1, parece estar más cerca que nunca de hacer historia en 2026. Con el respaldo de General Motors y un nuevo liderazgo estratégico, esta escudería apunta a convertirse en el primer equipo estadounidense en décadas con sede y motor propios en la categoría más importante del automovilismo.

Un proyecto que desafió las expectativas

En 2024, la Fórmula 1 rechazó el ingreso de Andretti Global, argumentando una falta de valor comercial, pese a la aprobación inicial de la FIA basada en criterios técnicos y deportivos. Sin embargo, lejos de abandonar el proyecto, la escudería avanzó en su desarrollo.

Estableció una base operativa en Silverstone, Inglaterra, y comenzó la construcción de su sede principal en Indiana, Estados Unidos. Además, integró al reconocido ingeniero Pat Symonds como asesor ejecutivo, reforzando su estructura tecnológica y deportiva.

El cambio de liderazgo en septiembre de 2024, con Dan Towriss asumiendo el rol de CEO, dio un giro significativo al equipo, que ahora cuenta con una sólida base financiera para afrontar los retos de la categoría.

El impacto de General Motors y Cadillac en la propuesta

La alianza con General Motors, a través de su marca Cadillac, representa un elemento crucial en la reconsideración de la Fórmula 1. Aunque GM no planea suministrar motores hasta 2028, su participación eleva la propuesta de Andretti como un equipo competitivo con ambiciones a largo plazo.

Para las temporadas iniciales, el equipo deberá contar con motores de otro proveedor. Las opciones más probables incluyen a Honda, debido a su relación con Andretti en la IndyCar, y Ferrari, que podría brindar apoyo técnico a este nuevo equipo.

Presión política y comercial en el automovilismo

El rechazo inicial a Andretti también captó la atención del Congreso de Estados Unidos. En 2024, Jim Jordan, presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, inició una investigación para analizar posibles prácticas anticompetitivas por parte de la Fórmula 1. Este movimiento puso bajo escrutinio la transparencia de las decisiones comerciales en el deporte.

Mientras tanto, Andretti continuó desarrollando su chasis para 2026, que será sometido a pruebas de la FIA a finales de este año, consolidando su preparación técnica para competir al más alto nivel.

Un equipo con historia y un mercado en crecimiento

La familia Andretti tiene profundas raíces en el automovilismo, con Mario Andretti coronándose campeón mundial de Fórmula 1 en 1978. La posible incorporación de la escudería no solo ampliará la parrilla, sino que también reforzará el interés en el mercado estadounidense, que ha crecido exponencialmente gracias a eventos como los Grandes Premios de Miami y Las Vegas.

Un nuevo capítulo para la Fórmula 1

La incorporación de Andretti Global podría marcar un antes y un después en la Fórmula 1, representando una expansión estratégica hacia el mercado norteamericano y un nuevo enfoque en el desarrollo de equipos independientes.

Si las negociaciones avanzan como se espera, el anuncio oficial podría darse en las próximas semanas, iniciando una nueva era en el deporte. La llegada de un equipo totalmente estadounidense, con un legado histórico y una apuesta tecnológica a futuro, promete revolucionar la parrilla en 2026.