Your browser doesn’t support HTML5 audio
Es lo que vemos, un fantasma, en menos de seis meses todo ha cambiado, incluso puede que en esa primera semana de la actual temporada, allá en pleno verano, puede que en ese instante hayamos visto la mejor versión de ese jugador que ilusionó a todo el madridismo tras su llegada hace poco más de un año.
Fue eso, una sensación, de los contados futbolistas que cumplen con las expectativas al momento de llegar a un nuevo club y si bien el hecho de arribar al Real Madrid adquiere una connotación especial debido al simbolismo y a la tradición del elenco español, si bien es así, David Alaba no creyó en suposiciones ni criterios superfluos respecto a su posible calidad para jugar en el Santiago Bernabéu.
El otro Alaba
Desde el comienzo lo hizo bien, perfecto diría y ante la mirada atónita de miles de aficionados, el hombre que debía sustituir nada menos que a Sergio Ramos cumplía con creces; marcaba goles, imponía orden en la zaga y era un referente dentro del esquema de Ancelotti, de donde iniciaban todo.
Así jugó más de 4000 minutos y en el Paseo de la Castellana, allí en pleno corazón de la capital española, era imposible no hablar de David Alaba.
En agosto lo vimos, era el mismo guion, pero como decíamos en una semana, aquel que anotaba ante el Eintrach en la Supercopa de Europa y luego frente al Almería en La Liga, aquel jugador se desaparecía.
El fantasma
Ya sea como central o de lateral izquierdo, como quiera el austriaco funcionaba, pero de pronto su estela se disipó. Se ha visto inseguro, carente de ideas, limitado en lo físico y en ese don natural que lo volvió un bastión casi inexpugnable en el Bayern Munich. Ancelotti sigue creyendo, ha confiado en su prominencia y refiere As que a pesar del mal momento, David Alaba ha visto acción en más de 20 partidos en lo que va de campaña.
El parón por el Mundial debió suponer una oportunidad ideal para que Alaba se reencontrará y dio señales, contó Marca que anotó un golazo ante Italia y fue galardonado como Futbolista del Año en Austria, dejando buenas sensaciones en el regreso a la acción pero otra vez emergieron las dudas de antaño, justo cuando una lesión en sóleo, tras el duelo contra el Villareal en Liga, lo dejaba fuera para la Supercopa de España.
Los reportes aseveran que debe regresar a finales de enero, tal vez a comienzos de febrero y en este sentido las dudas siguen, mucho más con el conjunto blanco inmerso en uno de los peores contextos de los últimos años, pero es David Alaba, aquel que llegó y generó ilusión y a pesar de los fantasmas que empiezan a merodear, hay que darle el beneficio de la duda.
Noticias relacionadas