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Es un largo viaje, pues hablamos de casi 3500 kilómetros de distancia; sí, nos referimos a un trayecto que va desde el este de Estados Unidos hasta lo más recóndito del Lejano Oeste; desde los grandes campos de trigo y maíz que allende a la Avenida Massachussets en Indianápolis, matizan el pasaje de Indiana en general, hasta llegar al corazón de California, a orillas del río Sacramento.
Es un largo viaje, el mismo que hace solo unos días tuvo que hacer Chris Duarte tras conocer que los Pacers de Indiana lo habían traspasado a los Kings de Sacramento.
El suceso
Así lo dio a conocer en su momento el prestigioso Shams Charania de The Athletic y al instante muchos en Quisqueya y más allá, comprendimos lo que podía representar este suceso para Duarte, el oriundo de Puerto Plata que hace dos años irrumpió a lo grande en las duelas del mejor baloncesto del mundo.
En su temporada de novato allí en Indiana, Duarte se ganó el respeto y la consecuente simpatía de fanáticos y especialistas en el universo de la NBA, luego que en 55 desafíos promediara 13,1 puntos por juego.
El impacto
Fue el debut soñado, pero con la entrada del sensacional Bennedict Mathurin a los Pacers, la impronta del dominicano se apagó de a poco, llegando a tal punto que vio reducida su presencia en la cancha de modo ostensible, capitalizando 7,9 tantos por encuentro.
En medio de este escenario cobraba todo el sentido el hecho de un hipotético traspaso en verano y así fue…Chris Duarte viajó a Sacramento.
- “… Estoy emocionado con esta nueva aventura…”- alegó Duarte tras su presentación con los Kings y al respecto añadió:
- “… Es una gran organización, con una increíble fanaticada y ya estoy ansioso por comenzar a trabajar con el equipo…”.
La gran oportunidad
En este contexto cabe precisar que si en un primer momento, el traspaso debía suponer un problema, la realidad demuestra que Chris Duarte deberá ganarse el puesto en Sacramento ante el empuje de figuras de la talla de Kevin Huerter, Harrison Barnes y Malik Monk, pero al mismo tiempo, el hecho de estar en un elenco ganador que ya mostró su potencial en la pasada zafra, este hecho cambia bastante la perspectiva.
Sin lugar a dudas es la gran oportunidad para Duarte que a sus 26 años lo tiene todo para imponer su clase y afianzarse al máximo nivel.
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