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A pesar de estar apenas en el inicio de la temporada NBA, los Denver Nuggets ya han identificado un área crítica que podría influir en su éxito a lo largo del año: la falta de un tirador fiable desde el perímetro. Tras la pérdida de Kentavious Caldwell-Pope y la incorporación de Russell Westbrook, el equipo ha hecho pocos movimientos adicionales en su plantilla. Sin embargo, su general manager, Calvin Booth, ha reconocido públicamente la necesidad de reforzar esta faceta del juego.

En una rueda de prensa reciente, Booth expresó su preocupación por la falta de profundidad en el tiro exterior, una situación que podría afectar las aspiraciones del equipo en una Conferencia Oeste altamente competitiva. Aunque confían en el potencial de su núcleo de jugadores, como Aaron Gordon y Peyton Watson, y valoran el sólido desempeño de Christian Braun, quien logró un 42,9% en triples tras el parón del All-Star el año pasado, Booth admitió que la plantilla tiene un margen de mejora.

«Estamos en una situación que bordea una línea fina respecto a nuestros tiros al tener a Westbrook, Gordon y Watson en la rotación», comentó Booth, según declaraciones recogidas por Bennett Durando del Denver Post. «Si bien Braun mostró una excelente capacidad tras el All-Star, es algo que debemos monitorear de cerca. Si vemos que necesitamos fortalecer esta área en la fecha límite de traspasos, no dudaremos en hacer lo necesario para mejorar».

El equipo de los Nuggets, liderado por figuras clave como Nikola Jokic y Jamal Murray, sigue siendo uno de los favoritos para ocupar un lugar destacado en la Conferencia Oeste. Sin embargo, la capacidad de anotar desde el perímetro es vital para el éxito en la NBA moderna, especialmente cuando se enfrentan a rivales con arsenales ofensivos profundos. Con la ventana de traspasos aún abierta, queda por ver si Denver tomará medidas para asegurar la incorporación de un tirador que complemente su juego y les permita seguir compitiendo al más alto nivel.