Your browser doesn’t support HTML5 audio

No todos los días uno va a poder observar que un mismo jugador anote más de 70 puntos en un partido de baloncesto, y por ende copará todas las portadas de todos los medios, tal como cuando Luka Doncic también ha hecho de las suyas en más de una ocasión.

Pero lo de Donovan Mitchell en la pasada noche ante los Chicago Bulls lógicamente entra en los libros de historia, al ser apenas el primer jugador en anotar 70 o más puntos y de paso otorgar al menos 10 asistencias en un partido de la NBA, algo muy relevante si consideramos que esta liga cuenta con 76 años de existencia.

Fue una de esas noches mágicas y en donde la inspiración llega desde incluso antes de comenzar el encuentro y que no se va hasta culminado el mismo; la victoria tenía que ser el resultado final, sobre  todo cuando eres capaz de anotar el 49% de los 145 puntos de tu equipo.

Unos Cavaliers que vale decir, han tenido una positiva fase regular, ahora con registro de 24-14, entre los cuatro mejores de la conferencia del Este, en buena parte gracias a la temporada de Mitchell, pero también aunado a un buen colectivo conformado entre otros por Jarrett Allen, Kevin Love y Lamar Stevens.

Además de ellos, han contado con un buen trabajo de sus jugadores alternativos, algunos con ese trabajo silencioso desde el banquillo; uno de ellos ha sido Robin López, quien a pesar de su baja producción ofensiva, ha sido de los compañeros más cercanos de Mitchell y que ha celebrado este triunfo también como si hubiera sido el protagonista principal.

En medio de la emoción por el triunfo importante ante los Bulls, López desde su cuenta personal de Twitter llegó a publicar lo siguiente: “Solo diré que Donovan Mitchell y Robin López se combinaron para anotar 72 puntos esta noche; juego histórico”.

Algo curioso y hasta jocoso, ya que sólo estuvo por lapso de 7 minutos en cancha, en donde solo acertó un tiro libre y tomó un solo rebote, pero que de igual forma fue testigo de una noche que en Cleveland difícilmente logren olvidar.

No cabe dudas  que Mitchell era ese jugador de alto calibre que necesitaba esta franquicia, desde la salida nuevamente del orgullo de esta zona, LeBron James, y que de momento, el objetivo de pisar la postemporada se estaría concretando a pasos firmes.