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El nombre de Julio Rodríguez lleva sonando apenas desde el 2022, pero al mismo tiempo ya es bastante conocido dentro del rey de los deportes. El chico que hizo su debut en la última temporada de las Grandes Ligas con los Marineros de Seattle se ganó el cariño y el respeto de propios extraños ni bien pisó los diamantes del mejor béisbol del mundo. Con sus destacadas actuaciones y múltiples marcas, el oriundo de la República Dominicana se erigió como el Novato del Año de la Liga Americana al final del curso, con apenas 21 años.
El nativo de Loma de Cabrera asombró tanto que incluso la afición de The M’s pidió que se le amarrara cuanto antes con una extensión de contrato, clamor que el club escuchó y decidió hacer de manera temprana. Para algunos los dueños de la divisa se excedieron, para otros hicieron lo correcto, aun así, lo cierto es que el noven jardinero central ya aseguró un total de 209.3 millones de dólares por los siguientes 12 años.
Ciertamente parece una apuesta prematura por parte de los Mariners y al mismo tiempo, todo lo que está bien. Este chico es la estrella joven más prominente que tiene la franquicia desde que apareciera en los años 90s el portentoso Alex Rodríguez, futuro 3 veces MVP y leyenda absoluta de la Gran Carpa. ¿Será este el destino que tiene preparado el futuro para J-Rod? No sabemos, pero hay razones para ilusionarse.
Ascenso meteórico
De momento, no podemos afirmar nada sobre la carrera de Julio, salvo lo que hemos visto hasta ahora. No obstante, si comparamos eso con lo hecho por A-Rod en la misma cantidad de juegos, podremos sacar conclusiones interesantes.
En el 2022 el novel guardabosques disputó 132 encuentros, un número que Alex se tardó 3 años en alcanzar, entre 1994 y 1996. La línea ofensiva del actual toletero de Seattle fue de .284/.345/.509, mientras que la del ex de los Yankees de Nueva York fue de .293/.338/.505. Aquí podríamos considerar un empate técnico.
En estadísticas como extrabases, encontramos que el mayor de los Rodríguez disparó en ese entonces 33 dobletes, 2 triples y 21 cuadrangulares. Por su parte, la estrella naciente estampó 25 tubeyes, 28 jonrones y 3 tripletes. Otra vez, muy similares ambos.
Por último, podríamos considerar carreras impulsadas y anotadas, pero de nuevo encontraremos similitud. El menor de ambos remolcó 75 rayitas y anotó 84. El ex cónyuge de Jennifer López impulsó a 82 compañeros y pisó en plato en 83 ocasiones.
Ahora, volviendo al quid de la cuestión, ¿Hay razones para que se le tenga tanta fe y estima a Julio Rodríguez en la ciudad de Seattle? La respuesta es un rotundo sí, el chico no solo promete, sino que ya es una realidad palpable.