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Ronny Mauricio tenía una línea ofensiva de .320/.360/.524 cuando salió cojeando de un juego. Desde hace ya un mes se habla en la Gran Manzana del prospecto como un futuro candidato a ser ascendido. Pero surgió algo, una lesión en el tobillo.

Mauricio se lesionó el tobillo a principios de este mes en una colisión sufrida mientras él trataba de hacer out al corredor que se deslizaba en la segunda base. Se perdió tres juegos antes de regresar a la alineación, pero los Mets enviaron a Mauricio a más pruebas después de que éste mostrara bajo rendimiento en su accionar.

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Fue entonces cuando se temió lo peor. Algo que podría poner en peligro su continuidad en las menores, una lesión, pero no fue así.

Ronny Mauricio está bien y su condición es día a día. La resonancia magnética reveló que solamente tiene un hematoma en el hueso del pie izquierdo. En otras palabras, tiene un moretón.

Nada de que preocuparse y mucho de qué alegrarse para la organización de los Mets, quienes tiene en Mauricio a un diamente en bruto que bien puede ser usado como carnada para un cambio, sobre todo ahora que vienen los equipos contendores a comprar para meterse en la reyerta de fin de temporada, bien sea como novato y miembro de los Mets.

Lo cierto del caso es que Mauricio no ira a lista de lesionados ni habrá que hacerle operaciones no intervenciones quirúrgicas. Su hemotoma cederá con descanso y tratamiento adecuado, se lee en el informe que tienen los Mets en su poder.

Mauricio, quien es un campocorto natural, ha estado aprendiendo a jugar otras posiciones. Tanto así que le lesión que lo mantiene momentáneamente fuera de circulación fue como segunda base.

Mauricio, además de la línea ofensiva ya mostrada anteriormente, acumula ocho jonrones, 35 remolcadas y nueve bases robadas en 14 intentos en 60 juegos con el Syracuse, sucursal Triple A de los Mets.