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El primer bateador de los Guardianes, Steven Kwan, abrió el juego del jueves por la tarde contra los Marineros con un doble, en la victoria de los Guardianes por 6-3. Eso elevó su promedio de bateo a .400. Registraría una base por bolas antes de hacer outs en sus últimos dos turnos al bate, lo que redujo su promedio a .396 en el año antes del final del juego.
Las Grandes Ligas de Béisbol no han visto a un bateador con un promedio de .400 desde que Ted Williams bateó .406 en 1941. La palabra “calificado” es importante aquí. Esto significa que un jugador ha jugado lo suficiente como para calificar para el título de bateo. Según las reglas, eso es 3,1 apariciones al plato por cada partido que ha jugado su equipo. Kwan se perdió tiempo debido a una lesión a principios de esta temporada, por lo que solo ha jugado 46 partidos en este momento.
Steven Kwan is now batting .400 with a 1.021 OPS in his 46th game of the season pic.twitter.com/X8Sm4AJyGd
— Talkin’ Baseball (@TalkinBaseball_) June 20, 2024
También tiene 209 apariciones al plato en 72 juegos de los Guardianes. Eso es 2.9 apariciones al plato por juego, por lo que no está calificado. Sin embargo, suponiendo que se mantenga saludable aquí durante las próximas semanas, siendo el primer bateador, llegará allí bastante pronto. Solo tenga en cuenta a medida que avanzamos que Kwan aún no está calificado.
En los últimos años, hay varios jugadores que se vieron cerca del .400 por un tiempo antes de caer. Cody Bellinger en 2019, estaba bateando .404 en 47 juegos. Terminó con .305, aunque fue lo suficientemente bueno todo el año como para ganar el MVP de la Liga Nacional. Luis Arráez tuvo una gran racha el año pasado. Estaba bateando .401 en 78 juegos de los Marlins el 24 de junio. Todavía estaba en .381 hasta el 1 de agosto. Ichiro Suzuki bateó .372 en 2004 y en 72 juegos de los Marineros solo tenía promedio de .323.
Kwan tiene buen contacto y una velocidad aceptable, mismas que se prestan para una gran oportunidad de que la pelota encuentre un hueco cada vez que está en juego. Solo resta que siga saludable y rezar para ver si conseguimos en esta era un bateador con .400.