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La selección paraguaya se prepara para un crucial enfrentamiento contra Bolivia el próximo martes en la ciudad de El Alto, correspondiente a la jornada 12 de las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial. Sin embargo, lo hará sin dos de sus piezas fundamentales: el defensor Omar Alderete y el mediocampista Andrés Cubas, ambos ausentes debido a sanciones disciplinarias.

Los dos futbolistas recibieron su segunda tarjeta amarilla durante el vibrante encuentro del jueves pasado, en el que Paraguay venció a Argentina por 2 a 1 en el estadio Defensores del Chaco en Asunción. Las amonestaciones dejan a la “albirroja” con importantes interrogantes tácticas de cara a un partido trascendental.

El impacto de las ausencias

Omar Alderete, defensa central del Getafe FC de España, fue amonestado a los 33 minutos del primer tiempo en una acción que generó polémica. Unos minutos después, tras una falta sobre Lionel Messi, estuvo al borde de la expulsión, lo que desató airadas protestas por parte de los argentinos. No obstante, Alderete continuó en el campo y se convirtió en el héroe de la noche al marcar el gol de la victoria al inicio del segundo tiempo. Su liderazgo defensivo y capacidad en el juego aéreo serán difíciles de reemplazar en una visita a 3,600 metros de altitud, donde las condiciones físicas serán un desafío.

Por su parte, Andrés Cubas, quien milita en el Vancouver Whitecaps FC de la MLS, también fue amonestado en el encuentro ante Argentina, apenas cuatro minutos después del gol de Alderete. Cubas es reconocido por su labor en el medio campo, donde combina recuperación y distribución del balón, una pieza clave para mantener el equilibrio del equipo paraguayo. Su ausencia deja un vacío significativo en una zona del campo que será crucial para contrarrestar a una Bolivia que suele hacerse fuerte como local.

Un equipo bajo presión

La situación de Alderete y Cubas no es el único problema que enfrenta el técnico Guillermo Barros Schelotto. Paraguay comenzó el partido ante Argentina con otros dos jugadores “en capilla”: Damián Bobadilla y Miguel Almirón. Aunque ambos evitaron ser amonestados, el equipo sigue acumulando desafíos en el tramo final de estas eliminatorias.

Agustín Sández, otro futbolista paraguayo con tarjeta amarilla acumulada, no fue convocado para el duelo ante Argentina, pero se perfila como parte de la delegación que viajará a Bolivia. Su inclusión podría ser clave para reforzar las opciones defensivas en un escenario tan complicado como el estadio Hernando Siles.

Bolivia en casa: un rival complicado

El enfrentamiento en El Alto representa un reto único para cualquier visitante. Con una altitud de más de 3,600 metros sobre el nivel del mar, Bolivia suele aprovechar estas condiciones para imponer un juego físico y desgastante. La selección local, conocida como la “Verde”, buscará sumar puntos vitales en su lucha por salir del fondo de la tabla.

Sin Alderete y Cubas, el técnico de Paraguay deberá ajustar su alineación para equilibrar experiencia y resistencia en un entorno adverso. Jugadores como Gustavo Gómez en la defensa y Miguel Almirón en el ataque tendrán que asumir roles más destacados para liderar al equipo en busca de un resultado positivo.

El camino hacia el Mundial

Con esta victoria frente a Argentina, Paraguay escaló posiciones en una tabla clasificatoria que sigue siendo disputada. Sin embargo, la pelea por un cupo directo o un repechaje se mantiene abierta, y cada punto cuenta. El próximo duelo contra Bolivia será una prueba crucial no solo para mantener el impulso, sino también para demostrar la profundidad del plantel.

El martes, la “albirroja” jugará no solo contra Bolivia, sino también contra la adversidad que implica perder a dos de sus titulares indiscutidos. Un triunfo en El Alto podría ser el impulso que Paraguay necesita para consolidar sus aspiraciones mundialistas, mientras que una derrota podría complicar el panorama.