Your browser doesn’t support HTML5 audio
Llegó el día, finalmente este sábado 10 de junio en el Atatürk Olimpiyat Stadium de Estambul se disputó la final de la edición 2022-2023 de la UEFA Champions League. Manchester City llegaba como gran favorito a la cita, después de destriur a Real Madrid en semifinales. Pero lo propio hizo Inter con su clásico rival de ciudad, Milan, y cuando el fútbol es a un sólo partido se hace más difícil de predecir.
La primera insinuación clara fue un disparo de Bernardo Silva de zurda al minuto 6, en tiro que si bien fue desviado pasó cerca del palo más lejano del arquero Onana. Precisamente el arquero de Inter fue clave para evitar que al minuto 27 Haaland abriera el marcador para Manchester City, cerrando muy bien el ángulo del disparo del noruego.
Pasada la media hora Manchester City perdió por lesión nada menos que a Kevin De Bruyne, una de las piezas claves de la fase ofensiva del equipo de Guardiola. El primer tiempo terminó con el marcador inalterado, y si bien Manchester City tuvo un par de incidencias, lo cierto es que Inter se vio bastante bien y parecía tener controlado el encuentro.
El marcador se abrió al minuto 68 con una internada de Bernardo Silva en el área que fue despejada a medias por la defensa de Inter para que entrara Rodri, quien consiguió la red por el lado derecho de el portero. Ventaja para Manchester City con una gran definicion de un volante central que suele hacer goles como este.
Rodri’s second-ever Champions League goal was one to 𝐫𝐞𝐦𝐞𝐦𝐛𝐞𝐫 🚀
(via @TUDNUSA) pic.twitter.com/Wb0LzJbVrS
— B/R Football (@brfootball) June 10, 2023
Casi en el cierre del partido, al minuto 89, Lukaku se perdió una oportunidad inmejorable con un cabezazo justo a donde estaba parado el arquero Ederson. Esta chance, sumada al intento en el travesaño de Dimarco minutos antes hacían increíble el hecho de que Manchester City se mantuviese en ventaja después de las chances clarísimas de Inter.
El favoritismo le pegó a Manchester City, pero no claudicó. Inter intentó e incluso mereció la igualdad teniendo en cuenta las chances que generó, pero Manchester City aguantó y merecidamente se corona como el nuevo campeón de Europa.