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Óscar Adolfo Villegas Cámara, nacido el 15 de abril de 1970 en Cochabamba, Bolivia, es el hombre que hoy lleva sobre sus hombros la responsabilidad de dirigir a la selección boliviana en las eliminatorias rumbo al Mundial 2026. Con un recorrido tanto como jugador y entrenador, Villegas ha demostrado ser una figura clave en el fútbol boliviano, enfrentando y superando diversas adversidades a lo largo de su carrera.

Una carrera marcada por la resiliencia

Villegas inició su vida profesional en las canchas a los 17 años, debutando con el club Aurora, para luego consolidarse en equipos importantes del país como Bolívar, San José, Jorge Wilstermann y Real Santa Cruz. Su carrera como futbolista, sin embargo, tuvo un final abrupto debido a una lesión de rodilla mientras jugaba para Independiente Petrolero en 1999, lo que lo forzó a retirarse prematuramente.

Lejos de rendirse ante esta adversidad, Villegas decidió volcarse al mundo de la dirección técnica. En sus primeros años como entrenador, fue asistente en equipos como Real Potosí y asumió roles protagónicos en clubes como Aurora, donde tuvo varias oportunidades de dirigir tanto al primer equipo como a categorías juveniles.

Un técnico con visión a futuro

Su experiencia en el desarrollo de talentos jóvenes lo llevó a ser contratado en 2007 por la Federación Boliviana de Fútbol, donde asumió la dirección de las selecciones sub-17 y sub-20. Este enfoque en la formación de jugadores jóvenes fue uno de los pilares que lo consolidaron como uno de los entrenadores más prometedores del país.

Tras un breve paso como técnico interino del Bolívar en 2016, Villegas continuó su carrera alternando entre equipos como Always Ready y Blooming, a menudo trabajando junto a su hermano Eduardo Villegas, quien también fue seleccionador nacional. A lo largo de estos años, Óscar fue acumulando experiencia y afianzando su estilo como un técnico táctico y disciplinado, con un claro enfoque en la preparación y mentalidad de sus equipos.

El desafío de la selección nacional

En julio de 2024, Villegas recibió su mayor reto hasta la fecha: ser el seleccionador de Bolivia para las eliminatorias sudamericanas. En un contexto donde la selección boliviana ha enfrentado múltiples dificultades en sus intentos por clasificar a un Mundial, la llegada de Villegas supone un cambio de dirección que busca inyectar una nueva energía al plantel.

Su experiencia en el manejo de jóvenes talentos, combinada con un profundo conocimiento del fútbol boliviano y la capacidad de adaptarse a situaciones complejas, son las principales cartas de presentación del nuevo entrenador. Villegas sabe que tiene por delante una tarea titánica: reconstruir un equipo que históricamente ha sido subestimado, y llevar a Bolivia a competir de tú a tú con las potencias de Sudamérica.

El camino por recorrer

Las eliminatorias sudamericanas son, sin duda, uno de los torneos más exigentes del mundo. Sin embargo, Villegas ha demostrado ser un estratega dispuesto a aceptar grandes desafíos. Su liderazgo será clave para cambiar la mentalidad de un equipo que necesita confiar en sus propias capacidades.

Con Óscar Villegas al mando, la selección boliviana comienza una nueva etapa. ¿Será suficiente su conocimiento y experiencia para llevar a Bolivia de vuelta a un Mundial? Solo el tiempo lo dirá, pero lo cierto es que, bajo su dirección, la Verde se prepara para luchar con renovada ilusión.