Your browser doesn’t support HTML5 audio
Vinicius Jr. encarnó como ningún otro jugador del Real Madrid la tragedia vivida en la final de la Supercopa de España. En un Clásico dominado de principio a fin por el Barcelona de Hansi Flick, el brasileño fue neutralizado por la defensa rival, mientras los merengues sufrían su segunda goleada consecutiva frente a su eterno rival, sumando una nueva crisis a la temporada.
Una actuación apagada en un escenario complicado
El extremo de Sao Gonçalo, acostumbrado a brillar en los momentos clave, fue reducido al silencio por un impecable Jules Koundé, quien contó con el respaldo constante de Ronald Araujo. Durante los 75 minutos que estuvo en el campo, Vinicius apenas dejó un destello: un desborde al inicio de la segunda parte que terminó en un centro para Rodrygo, cuyo disparo fue al poste.
📸 – Vinicius Jr watching Gavi celebrating the 5-2 victory. pic.twitter.com/d0bUfdxBxy
— TheEuropeanLad (@TheEuropeanLad) January 12, 2025
La frustración del brasileño se reflejó en un amague de indisciplina. Recibió una tarjeta amarilla por protestar y protagonizó un polémico pisotón a Koundé que no fue sancionado con una expulsión por el árbitro Gil Manzano. Este episodio pudo haber igualado la contienda en términos numéricos, ya que el Barcelona jugaba con un hombre menos tras la expulsión de Wojciech Szczesny.
Un equipo sin respuesta
Ni siquiera la ventaja de jugar contra 10 hombres permitió al Real Madrid encontrar el camino al gol. El Barcelona, sólido y organizado, no cedió ante las embestidas blancas. Carlo Ancelotti, en un intento por revivir el ataque, decidió sustituir a Vinicius, dejando en el campo a Mbappé y Rodrygo, aunque el cambio no alteró el destino del partido.
En el banquillo, la expresión de Vinicius era el reflejo de la impotencia colectiva. Aunque el brasileño no fue el único responsable del naufragio, su apagada actuación subraya la falta de chispa en un equipo que había mostrado señales de mejoría en semanas anteriores.
El Barcelona, en estado de gracia
Hansi Flick ha transformado al Barcelona en poco tiempo, recuperando la hegemonía en los Clásicos con dos goleadas consecutivas que han humillado al conjunto blanco. La derrota no solo golpea la moral del Real Madrid, sino que también reabre preguntas sobre la dirección del equipo y la capacidad de Ancelotti para devolverlo a la senda del éxito.
Vinicius Luther King Jr. ya con amarilla igual sabe que puede hacer lo que quiera. Es shimples. pic.twitter.com/ZkWzwBkEO6
— Llourinho (@Llourinho) January 12, 2025
Lo que viene para el Real Madrid
La derrota en la Supercopa deja al Madrid con la obligación de replantear estrategias y recuperar confianza antes de enfrentar nuevos desafíos en Liga y Champions. Jugadores como Vinicius deberán retomar su mejor nivel para liderar una plantilla que necesita respuestas inmediatas.
En un torneo donde las expectativas eran altas, la imagen final del equipo quedó marcada por la frustración y la falta de contundencia, dejando a Vinicius y al resto del plantel con mucho trabajo por delante para revertir esta crisis.
