Franco Colapinto, en Brasil: un piloto golpeado por la pérdida de su abuelo

El circuito de Interlagos fue testigo este fin de semana de una imagen poco habitual en el joven piloto argentino Franco Colapinto, quien llegó al autódromo con una actitud que distaba mucho de su característica energía y sonrisa. Colapinto, quien normalmente interactúa con la prensa y fanáticos con entusiasmo, mantuvo un perfil reservado y se mostró visiblemente afectado luego del fallecimiento de su abuelo, Leónidas Colapinto, un referente y sostén en su carrera y vida personal.

Sin responder a las preguntas de los medios presentes, entre los cuales había un gran número de periodistas argentinos, Colapinto ingresó al autódromo de Sao Paulo portando una gorra que cubría parcialmente su rostro y auriculares, en un claro intento por mantener la concentración en la pista y, a su vez, evitar el contacto visual que pudiera delatar su tristeza.

A pesar de las difíciles circunstancias personales, Franco Colapinto cumplió con las primeras sesiones de la jornada. En la práctica libre 1 finalizó en el puesto 13 y en la clasificación del Sprint se ubicó 14°. Sin embargo, tras las primeras vueltas en el trazado brasileño, el piloto solo accedió a brindar una breve entrevista a la prensa oficial de la competencia, en la cual se mostró notablemente afectado y explicó los desafíos que enfrentó en el trazado.

Este inesperado golpe emocional llega en un momento clave de la temporada para Colapinto, quien continúa su crecimiento en el mundo de la Fórmula 1. La ausencia de su abuelo Leónidas, una figura fundamental en su vida, marca un momento sensible para el piloto argentino. Con una madurez que supera su corta edad, Franco ha optado por mantener la concentración en sus metas, demostrando una vez más su resiliencia en una temporada marcada por logros y desafíos.

Se espera que, en los próximos días, Colapinto retome su usual relación con la prensa y sus seguidores, quienes han enviado innumerables muestras de apoyo desde Argentina y el mundo. Sin embargo, la tristeza en su rostro refleja la importancia de su abuelo en su vida y carrera, un vínculo cuya ausencia seguramente será difícil de suplir para el joven piloto.