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Anthony Edwards, la joven estrella de los Minnesota Timberwolves, sigue en el ojo del huracán. La NBA le impuso una multa de 75,000 dólares por sus comentarios contra los árbitros Sean Wright y Sean Corbin después de la derrota de su equipo ante los Golden State Warriors. Con esta nueva sanción, Edwards acumula un total de 135,000 dólares en multas en menos de dos meses, convirtiéndose en uno de los jugadores más castigados de la temporada por la liga.

Críticas al arbitraje y un estilo explosivo

Tras el encuentro ante los Warriors, Edwards no se guardó nada y expresó su frustración con términos fuertes hacia el arbitraje:

“Fue un arbitraje jodidamente horrible. A ellos se les pitaban faltas muy ligeras y a nosotros no nos daban nada”.

El escolta señaló directamente a dos de los árbitros, Sean Wright y Sean Corbin, aunque curiosamente excluyó de las críticas a Simone Jelks, el tercer oficial del partido. Sin embargo, su diferenciación no evitó que la NBA tomara medidas disciplinarias.

Un historial creciente de sanciones

Esta no es la primera vez que Edwards se encuentra en problemas con la liga. En noviembre, fue multado por hacer un gesto obsceno hacia un espectador durante un partido ante los Sacramento Kings, lo que le costó $25,000. Poco después, en diciembre, la NBA lo sancionó con otros $35,000 por usar lenguaje vulgar durante una rueda de prensa. Aunque en esa ocasión estaba elogiando a sus compañeros tras una victoria, la liga consideró inapropiada su forma de expresarse.

Con esta nueva multa, Edwards suma un total de $135,000 en sanciones, lo que ha generado cuestionamientos sobre su temperamento y su capacidad para manejar situaciones de alta presión.

¿Una lección por aprender?

El talento de Anthony Edwards es indiscutible, pero sus recientes comportamientos fuera de lugar están comenzando a eclipsar su rendimiento en la cancha. Los analistas señalan que, aunque su pasión y competitividad son cualidades valiosas, deberá encontrar un mejor equilibrio para evitar perjudicar tanto su imagen como a su equipo.

Por ahora, los Timberwolves no han emitido un comunicado oficial al respecto, pero la franquicia podría intervenir para evitar que su jugador estrella siga acumulando problemas con la liga.

Con apenas 22 años, Edwards aún tiene tiempo para madurar y aprender de estas situaciones. Sin embargo, cada nueva multa refuerza la necesidad de un cambio en su actitud si quiere consolidarse como uno de los referentes de la NBA, tanto dentro como fuera de la cancha. ¿Será esta sanción el punto de inflexión para el joven escolta?