¿Efecto Towns? Los Timberwolves con mejor cara se acercan a los Playoffs

Cuando todo parecía que el panorama se le complicaba en demasía a los Minnesota Timberwolves en la conferencia del Oeste, han podido tomar un segundo aire justo en el momento en el que más se necesitaba, porque hasta hace pocos días se encontraban fuera de la zona de clasificación.

Simplemente necesitaban dar un vuelco a su complicada situación; algo así como un giro de 180 grados, y enseguida concluimos que requerían de manera urgente el regreso de Karl-Anthony Towns, como esa pieza que les faltaba para terminar de armar su rompecabezas.

Y es que desde el regreso del dominicano a la acción, tras haber estado ausente por casi 4 meses, el conjunto de Minneapolis ha ganado 3 partidos en fila, pero en realidad suma ya cuatro duelos seguidos sin caer derrotados, dado que en la jornada de este lunes lograron una heroica victoria en su visita al inspirado conjunto de los Sacramento Kings.

Justo este reciente triunfo pudiera significar una especie de envión anímico para lograr su clasificación a los Playoffs; ahora con un mejor registro de 39-37 y en tan poco tiempo se han colocado a solo un juego y medio del cuarto lugar que ocupan los Phoenix Suns, y es algo que solo pueden significar buenas noticias para una franquicia que está llamada para lograr mejores cosas.

Se nota un cambio radical a nivel interno, un mejor ambiente, mejor química y camaradería, muy necesaria en esta parte de la campaña; se comienzan a ver los resultados que pretende la directiva que ahora encabeza el nuevo vicepresidente de operaciones, Tim Connelly, quien en reiteradas veces ha apuntado a que Towns sea por varios años el jugador franquicia de los Timberwolves.

Solo que en esta edición ha vivido la más dura y complicada de toda su carrera, producto de su salud y problemas físicos, que hasta le han puesto en duda para participar con la selección nacional dominicana en el próximo mundial de selecciones de FIBA; pero buena parte de las esperanzas las han cifrado en el nacido en New Jersey, pero con esa garra quisqueyana que a muchos de este país caracteriza.