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Klay Thompson ha dado el primer paso en su nueva aventura con los Dallas Mavericks, un equipo que ha despertado mucha expectación tras su incorporación. Tras 13 años en los Golden State Warriors, donde se consolidó como uno de los mejores tiradores de la NBA y ganó cuatro anillos de campeón, Thompson ha decidido cambiar de rumbo. Su debut con los Mavs no pasó desapercibido, aunque la derrota ante los Utah Jazz por 107-102 fue lo menos importante en una noche llena de emociones para el escolta.

Thompson, quien llevaba días sintiendo la presión y los nervios de su debut, confesó que no se había sentido tan ansioso desde las Finales de la NBA de 2015. “Me sentí bien al finalmente jugar y liberar esos nervios. Ha sido una experiencia nueva después de estar tanto tiempo en un lugar y ahora en otro”, explicó tras el partido.

Un debut prometedor

A pesar de la derrota, Thompson tuvo una actuación sólida en sus 18 minutos en la cancha, anotando 10 puntos y repartiendo 3 asistencias, destacando su capacidad para encestar triples, con un 3/5 desde la línea de tres puntos. Con un promedio de carrera del 42% en triples, Thompson sigue demostrando que su precisión desde larga distancia sigue siendo su mayor fortaleza, algo que los Mavericks esperan aprovechar en su lucha por el título.

Además, Klay lució el número 31 en honor a su ídolo de la infancia, Reggie Miller, ya que su habitual número 11 está en posesión de Kyrie Irving. Curiosamente, este dorsal también lo portó Jason Terry, una leyenda de los Mavericks que fue clave en el campeonato de 2011. “Verlo con la banda en la cabeza y el número 31 me llena de alegría. Todo lo que le dije fue que meta sus tiros y haga sus números. Sé que tiene mucho que demostrar en Dallas”, comentó Terry.

Nuevos desafíos en Dallas

Thompson, quien ha firmado un contrato de 3 años y 50 millones de dólares con los Mavs, está ansioso por escribir un nuevo capítulo en su carrera. “Estoy muy emocionado por vivir esta nueva etapa. Va a ser muy especial. Estoy seguro”, aseguró tras su debut.

La decisión de unirse a Dallas representa un cambio de escenario después de una exitosa carrera en Golden State. En los Mavericks, Klay busca volver a disfrutar del baloncesto y enfrentar nuevos retos, con la esperanza de añadir otro campeonato a su ya impresionante lista de logros. A pesar de que su camino en Dallas acaba de empezar, las expectativas son altas, y Thompson está listo para liderar al equipo junto a Luka Dončić y Kyrie Irving hacia nuevas alturas.

Con su llegada, los Mavericks no solo ganan un veterano con experiencia en campeonatos, sino también a uno de los mejores tiradores de la historia. El reto es grande, pero para Klay Thompson, cada nuevo desafío es una oportunidad para dejar su huella, y Dallas podría ser el escenario perfecto para su resurgimiento.