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El día tan esperado finalmente llegó; el 8 de febrero será una de esas fechas inolvidables para todo el baloncesto de la NBA, porque sencillamente LeBron James se ha convertido en el jugador con mayor cantidad de puntos en toda la historia de esta disciplina, dejando atrás a Kareem Abdul-Jabbar.

No era una tarea muy sencilla, ya que necesitaba anotar al menos 36 puntos ante el difícil conjunto del Oklahoma City Thunder, pero el escenario del “Crypto.com Arena” estaba aguardando por tan importante momento y pues desde el salto entre dos le brindó todo el apoyo a su máxima figura.

Atrás ha quedado un registro que se mantenía vigente desde 1989, justo en la temporada de despedida del legendario pívot de los Lakers, que en su momento llegó a brillar también con los Milwaukee Bucks, y que sus 38.387 puntos parecían algo inalcanzables.

Pero entre tanta expectativa, el nativo de Ohio en su vigésima temporada se ha encargado de destronarlo y pues, ahora está en lo más alto entre los anotadores de la élite de este deporte; con un primer canasto de larga distancia que hizo delirar a todos quienes asistieron al recinto californiano.

Era solo cuestión de tiempo, y el destino quiso que fuera ante sus aficionados, luego de haber transitado por una complicada gira por la zona Este, y en medio de una crisis deportiva en cuanto a resultados de los Lakers, que los han mantenido fuera de la clasificación.

‘Bron’ comenzó con 8 puntos en el primer parcial, que a su vez culminó con victoria por solo dos puntos del conjunto de la visita, que tenía como de costumbre al canadiense Shai Gilgeous-Alexander como su hombre principal en la ofensiva.

Los minutos seguían pasando, y bajo la mirada también impaciente de Abdul-Jabbar, quien se encontraba como invitado de lujo para presenciar como pulverizaban su tan labrado récord.

12 puntos más llegó a sumar en el segundo periodo para así arribar a 20 unidades, pero la visita llegaba con la intención de amargar la noche a todo el conglomerado presente y al propio James; entonces acá la ventaja en el marcador era de 10 puntos para el Thunder, y solo le faltaban 16 puntos al de Ohio para la máxima gloria.

Las proyecciones apuntaban que en los minutos finales del duelo llegaría a los 36 puntos que estaba buscando; y en efecto, lo ha intentado lograr de la mejor manera y de la más inesperada quizás, es decir, emulando el famoso “Skyhook” del propio Abdul-Jabbar, como una manera de rendirle tributo.

Pero más allá de la forma en que lo lograra, se trata simplemente de una leyenda más que viviente y que dejará un legado muy difícil de superar, con todo y las otras grandes figuras que hoy día engalanan a la NBA. ¡Larga vida al Rey LeBron!