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Los Chicago Bulls se recuperaron de una terrible racha de seis derrotas consecutiva y vencieron de manera exagerada 131-87 a los Brooklyn Nets, en la jornada del viernes por la noche en la NBA.
Los Toros se volvieron apoyar en Zach LaVine para salir del bache donde se encontraban y destrozaron al conjunto neoyorquino, que ya parecen haber tirado la toalla en la temporada después de dejar ir a sus máximas estrellas, Kevin Durant y Kyrie Irving.
El triunfo de los seis veces campeones de la NBA fue histórico, ya que terminaron con una diferencia de 44 puntos de ventaja, lo que viene siendo la victoria más abultada para romper una racha de reveses de seis o más partidos en una temporada.
LaVine terminó con 32 unidades, seis rebotes y par de asistencias siendo el máximo anotador del compromiso. Mientras que, DeMar DeRozan y Patrick Williams añadieron 17 puntos cada uno para convertir el encuentro en un verdadero festival para la franquicia.
Los dirigidos por Billy Donovan no dejaron respirar al quinteto de Brooklyn y se fueron al descanso (63-29) por diferencia de 34 puntos. Para la parte complementaria del juego, Chicago no bajó la intensidad y lograron su máxima cantidad en un cuarto con 34 contables en el tercer y último parcial.
La ofensiva de los Nets fue opacada por completa por la defensa de los Bulls, quienes solo permitieron 29 unidades en los primeros dos periodos. Alex Caruso fue parte importante del extraordinario trabajo defensivo de Chicago.
Cabe destacar que, los toros llegaron a tener ventaja de hasta 50 tantos de diferencia marcador en la pizarra 101 por 51 cuando iniciaban las acciones en el cuarto parcial.
El lauro abultado del equipo despierta el ánimo para la segunda parte de la temporada, ya que el conjunto se encuentra peleando por los puestos de Play-in tras ocupar la undécima posición en la Conferencia Este con marca de 27 ganados y 33 derrotas.