Your browser doesn’t support HTML5 audio

Luego del final de la temporada 2022 de las Grandes Ligas con el triunfo de los Astros de Houston sobre los Phillies  de Philadelphia en la Serie Mundial, todo apuntaba a que tendríamos un mercado activo y sin precedentes, con fichas de alto valor encabezándolo y probablemente, con contratos multimillonarios al final del mismo; tal parece que así será.

Mientras piezas de gran valía como Aaron Judge y Carlos Correa aguardan de forma tranquila su turno, otros pesos pesados como Jacob deGrom y Justin Verlander ya estamparon su rúbrica.

El ex de los Mets de Nueva York decidió irse a los Rangers de Texas con un trato por 5 años de duración y 185 millones de dólares, además de la posibilidad de extender el convenio a 222 ‘palos’ con un calendario más de sus labores. Por su parte, el actual Cy Young de la Liga Americana cubrirá a partir del 2023 el lugar dejado por deGoat en el cuadro de Queens, después de acordar por 2 campañas y 86 millones de ‘verdes’.

¿Un tercer beneficiado?

De acuerdo con lo reportado por algunos medios estadounidenses y también por lo que dictamina la lógica de las negociaciones, hay alguien que se verá muy beneficiado por los pactos tempraneros de deGrom y Verlander. Estamos hablando de Carlos Rodón, ex de los Medias Blancas de Chicago que defendió los colores de los Gigantes de San Francisco en el último ciclo y que era, por detrás de los 2 mencionados, el tercer lanzador más cotizado en la agencia libre. Ahora es el número 1.

Con tantos equipos buscando mejorar sus rotaciones abridoras, lo más probable es que el zurdo de casi 30 años de edad (los cumple en pocos días) aumente su valor de un modo importante. Es más, hay quienes ya señalan que podría estar buscando un ofrecimiento de 6 años o más, algo que hace unos días hubiera sido impensable.

También auguran que la tasa de salario anual para él se ubicaría cerca de los 30 millones de dólares, más si se toma en cuenta que quien le representa es el habilidoso Scott Boras, experto en sacar partido de este tipo de circunstancias. No se sabe cuál será el final de esta historia, pero lo cierto es que Carlos Antonio debe estar festejando desde ya.