Your browser doesn’t support HTML5 audio

En agosto cumplirá 29 años y nació en Nueva Jersey, allá a mediados de los 90, pero en su tez bruñida descollan los rasgos propios de sus antepasados y eso Alex Reyes siempre lo ha llevado consigo.

A estas alturas, pocos se acuerdan de él, la memoria es así y con más veras en un mundo tan globalizado como este, donde los ritmos álgidos definen el día a día de las personas, la memoria y en consecuencia los recuerdos, tienden a ser algo efímero, bien corto diría y de aquel muchacho sobrado de talento que deslumbró a más de uno en Busch Stadium, apenas quedan sutiles flashazos.

La figura

Con sus casi dos metros de estatura y sus 100 kilogramos de peso, Reyes, descendiente de dominicanos, irrumpió en la escena de MLB en 2016 y al instante, muchos aseguraron que era el cerrador del futuro de los Cardenales de San Luis. Su nombre ya sonaba en Ligas Menores y la muestra al primer nivel dejaba excelentes sensaciones.

Y estaban los problemas con el control, de hecho, lo siguen estando, es el gran lastre que lo ha limitado siempre, tiene una bola rápida ampliamente por encima de las 90 millas,  así como una excelente slider, pero como sea, el fantasma del descontrol sigue merodeando por ahí, al punto que no lanza desde 2021, pero al ponerlo en contexto,  la primera interrogante que emerge es esa, la de su control; no obstante su impronta sigue generando interés.

El antecedente

Aquel fue un buen año, 2016, me refiero, pues en 12 juegos trabajados, Reyes sumó 46 entradas con 52 ponches y una efectividad de 1,57, además de un forja de 4-1 y si bien casi ni lanzaría entre 2018 y 2020, para 2021 eclosionaba como la gran promesa que en su día había prometido ser.

Lanzó en 69 partidos, salvó  29, dejó marca de 10-8 y un promedio de limpias de 3,24 en 72,1 tramos, además de propinar 95 ponches y sostener un whip de 1,35, guarismos más que validos para ser elegido a su primer Juego de Estrellas.

La caída…

Todo pasó muy rápido, como instantes fugaces y de vivir su mejor momento como relevista en La Gran Carpa, Alex Reyes vio  como sus problemas de hombro lo acabarían apagando casi por completo, quedando fuera de acción durante todo el 2022.

Por esos azares que cuece el destino, los cuatro últimos lanzamientos de Alex Reyes en aquella temporada de hace dos años fueron ante los Dodgers de los Ángeles, específicamente en la novena entrada  del Juego de Comodines de la Liga Nacional.

Nos recuerda Jack Harris de Los Ángeles Times que Reyes fue llamado con el cotejo igualado para enfrentar a Chris Taylor, contra quien dejó colgando un slider que acabaría siendo depositada más allá de las cercas.

En el presente

Dos años después, trasciende la noticia de que hace solo unas horas, los propios Dodgers decidieron ofrecerle un acuerdo de 1 año y 1,1 millones de dólares a Reyes. Sin dudas una apuesta bastante arriesgada, pues los reportes mencionados por las mismas fuentes aseveran que el serpentinero no podría volver a la acción hasta agosto.

Al respecto, el reconocido periodista, Juan Toribio, alegó que el monto total del acuerdo, pudiera ascender hasta los 10 millones de dólares por los incentivos relacionados con el cumplimiento de varios cifras en cuanto a rendimiento.

La expectativa

La incertidumbre está, las noticias sobre su evolución tienden a ser halagüeñas, pero de eso no hay certezas hasta que Reyes regrese al diamante, sin embargo, en este sentido una analogía se impone, pues hace dos temporadas, pocos apostaban algo por Evan Philips y al día de hoy, hablamos del cerrador del equipo californiano de cara a esta zafra de 2023.

Aquel día de octubre de 2021, tras el jonrón de Taylor, Alex Reyes tal vez solo pedía que se lo tragará la tierra, dos años después el destino lo pone en el lugar que nunca hubiese imaginado.