Your browser doesn’t support HTML5 audio

A solo días del Opening Day, los Dodgers de Los Ángeles enfrentan una incógnita preocupante en torno a una de sus principales estrellas: Mookie Betts. El jugador reveló que ha perdido casi 20 libras debido a un problema estomacal persistente, lo que ha generado inquietud en la organización y en los aficionados.

Una enfermedad sin diagnóstico claro

Betts, quien normalmente juega con un peso aproximado de 175 libras, declaró que actualmente está en 157 libras, producto de una dolencia que le impide retener alimentos. El problema se manifestó antes del viaje del equipo a Japón y, desde entonces, el ocho veces All-Star ha lidiado con vómitos recurrentes y una marcada pérdida de peso.

“Estoy cansado de estar sentado, cansado de vomitar, cansado de todo esto. Solo quiero jugar”, confesó Betts a la prensa tras ser retirado del lineup a última hora en el partido del Freeway Series contra los Angels.

El malestar ha sido tan intenso que el propio jugador reconoció que siente miedo de comer, ya que cada vez que lo hace, termina vomitando. “Mi cuerpo se está consumiendo a sí mismo”, añadió, reflejando la gravedad de la situación.

Los Dodgers, cautelosos con su recuperación

A pesar de someterse a diversos estudios médicos, incluyendo análisis de sangre y pruebas generales, los resultados han sido normales, lo que ha incrementado la incertidumbre sobre su estado. Los médicos del equipo le han recetado un nuevo medicamento para tratar su problema estomacal, aunque aún no se ha determinado con exactitud la causa de su padecimiento.

El Dr. Neal ElAttrache, médico del equipo, ha enfatizado la necesidad de manejar la recuperación de Betts con cautela, destacando que un regreso apresurado podría derivar en lesiones musculares, especialmente debido a su actual nivel de deshidratación. “Si Mookie sale a jugar ahora y se desgarra un oblicuo o sufre una lesión en los isquiotibiales, podría perderse hasta seis semanas”, advirtió.

¿Podrá estar en el Opening Day?

Con el inicio de la temporada a la vuelta de la esquina, el manager Dave Roberts ha confirmado que Betts no jugará en el partido del lunes y que su participación en el Opening Day contra los Tigers está en duda. Mientras tanto, Miguel Rojas se perfila como su reemplazo en el campocorto.

La incertidumbre en torno a Betts representa un golpe para los Dodgers, quienes buscan defender su título de la Serie Mundial con una plantilla estelar que incluye a Shohei Ohtani y Yoshinobu Yamamoto. Sin embargo, la prioridad en este momento es la salud del jugador, cuya situación sigue generando preocupación en la organización y entre los aficionados.

Con la temporada apenas comenzando, los Dodgers prefieren tomar precauciones con su estrella, esperando que pueda recuperarse por completo antes de regresar al campo. Pero con su peso cayendo rápidamente y sin una solución clara a la vista, la gran pregunta es: ¿cuánto tiempo más podrá seguir jugando Mookie Betts en estas condiciones?

MLB